Este sábado se conmemora el Día Mundial contra la Rabia y en ese marco el Colegio de Veterinarios de la provincia de Buenos Aires (Cvpba) resaltó “la importancia de brindar un cuidado adecuado a nuestros animales de compañía, cumpliendo con las medidas esenciales, como la vacunación antirrábica a partir de los 3 meses de edad y su aplicación anual”. En un comunicado, el Colegio recordó que “esta medida es fundamental para prevenir la rabia, una enfermedad zoonótica que puede ser mortal tanto para los humanos como para los animales”.
Según informaron desde la entidad, “recientes registros en el AMBA han actualizado la información sobre murciélagos enfermos, revelando que 15 de las 70 especies presentes en Argentina son relevantes en la transmisión de la rabia. Aunque solo entre el 5 y el 8% de los murciélagos analizados resultan positivos, es crucial tener en cuenta que muchos casos pueden no ser reportados, ya que solo se estudian los murciélagos capturados y enviados a los centros de zoonosis”.
El rol de los murciélagos en el medio ambiente
Con más de 1.400 especies identificadas, los murciélagos son el grupo de mamíferos más diverso y abundante del mundo, solo superados por los roedores. A pesar de su importancia ecológica, el desconocimiento y los mitos han contribuido a una percepción negativa de estos animales.
Existen diferentes clases de murciélagos que desempeñan un papel crucial en el medio ambiente, como por ejemplo:
- Murciélagos frugívoros: ayudan en la regeneración de selvas y bosques al dispersar semillas.
- Murciélagos nectarívoros: son esenciales para la polinización de ciertas plantas.
- Murciélagos insectívoros: controlan las poblaciones de insectos, siendo más efectivos que las aves, lo que contribuye a la reducción de plagas en cultivos y a la disminución de insectos que transmiten enfermedades.
Por estas razones, es fundamental desmitificar a los murciélagos y promover su conservación.
La rabia y sus síntomas
Causada por el virus del género Lyssavirus, la rabia es una enfermedad zoonótica que se transmite a los humanos a través de la saliva de animales infectados, tanto domésticos (principalmente perros y gatos) como silvestres (murciélagos, zorros, zorrillos). El virus puede ingresar al organismo a través de mordeduras o arañazos.
Según las estadísticas, los perros son responsables de más del 99% de los casos humanos de rabia a nivel mundial. Por eso, es vital que tanto personas como mascotas estén vacunadas, ya que los murciélagos pueden morder a animales de compañía, que posteriormente pueden entrar en contacto con humanos.
El período de incubación varía, y en humanos puede ir de menos de dos semanas a más de un año, con un promedio de 2 a 4 meses. Este período depende de factores como la localización y profundidad de la herida, la cercanía de troncos nerviosos y la cantidad de partículas virales inoculadas.
El virus rábico es neurotrópico y su acción en el sistema nervioso central puede provocar encefalomielitis aguda. Los síntomas incluyen fiebre, delirios, espasmos musculares involuntarios y convulsiones, evolucionando hacia parálisis, alteraciones cardiorrespiratorias y, finalmente, coma y muerte en un período de 5 a 7 días.
Dado los riesgos de esta enfermedad, es crucial la profilaxis post-exposición, que incluye la vacunación y la inmunoglobulina, según la gravedad del caso.
Vacunación
Así, el Cvpba destacó “la importancia de la vacunación antirrábica en mascotas, medida que es obligatoria a nivel nacional”. “Esta vacunación es clave para prevenirla y se está trabajando para erradicar la enfermedad a nivel mundial bajo el lema ‘0 rabia para el 2030’“, afirmó. El objetivo, entonces, es eliminar la enfermedad para el año 2030 a través de políticas de Estado y estrategias conjuntas que promuevan la prevención.
“En este esfuerzo, el Cvpba se compromete no solo a coordinar las tareas de vacunación con los veterinarios, sino también a difundir información a la comunidad, subrayando que la prevención es el mejor tratamiento”, cerró el texto del Colegio. (DIB)