Un cartel con esa frase recibirá a Juan Grabois, el precandidato presidencial de Unión por la Patria, que compite con Sergio Massa y se espera que llegue a las 20.30 al Teatro Verdi. Pero también lo recibirá una enorme bandera con la imagen del Gauchito Gil, justo al lado de otra, igual de grande, de Evita y de Perón.
Mientras el clima se mantiene lejos del exitismo y pegado a la cautela, quizá esta sea la locación que más “justificación” necesitó en toda una larga tarde/noche de previa de los resultados de las PASO. Es que Grabois eligió calmar ansiedades “cortándose solo”, por separado, en un histórico teatro de La Boca que -como su equipo lo remarcó insistentemente a Clarín- tiene un significado especial para el dirigente social.
“Acá el Movimiento de Trabajadores Excluidos realizó sus primeras elecciones y también un acto por el 1º de mayo que fue fundante en el vínculo con Jorge Bergoglio, hoy Francisco”, resaltaron. Y, justamente, también se vieron pancartas relacionadas al Papa: “Votá con el corazón”.
La justificación de la selección de la locación, indirectamente, también se tomó como una tácita explicación de por qué se eligió un predio que -con sillas rotas, zapatillas sobrecargando enchufes, un par de mesas y un router que a veces daba wifi- apenas pudo adaptarse para que el periodismo cubra la forma en la que Grabois esperaba el voto popular.