La reciente validación internacional de los títulos médicos argentinos, impulsada por el cumplimiento de estándares globales, abre un nuevo capítulo para los profesionales de la salud del país. Sin embargo, junto a la oportunidad de movilidad laboral, surge el debate sobre el impacto que esta medida podría tener en la disponibilidad de especialistas en el sistema sanitario local. “Es un tema preocupante”, indicó el presidente del Círculo Médico de San Nicolás, Juan Ignacio Brogliatti.
De la redacción de EL NORTE
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En un anuncio histórico, el Ministerio de Capital Humano confirmó que los médicos argentinos ahora tienen garantizada la validez internacional de sus títulos. Esta decisión, impulsada por la certificación de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria según los estándares de la Federación Mundial de Educación Médica (WFME), marca un hito significativo para la profesión médica en el país.
Según el comunicado oficial, esta medida permitirá a los profesionales de la salud ejercer en el exterior sin necesidad de recertificar sus títulos, simplificando así uno de los principales obstáculos que enfrentaban al buscar oportunidades fuera de Argentina. La validación internacional de los procesos de acreditación de la educación médica en la Argentina ha sido reconocida como equiparable a estándares globales, un logro destacado por las autoridades educativas locales.
EL NORTE consultó al Dr. Juan Ignacio Brogliatti, presidente del Círculo Médico de San Nicolás y asesor de Femeba, quien expresó sus primeras impresiones con relación al tema: “Es algo muy reciente. Si bien hay una comunicación oficial (por parte del Ministerio), aún no hay un comunicado oficial del Colegio de Médicos”.
Respecto a la novedad, el profesional reconoció que “una de las trabas que tenían los médicos para ejercer afuera era la homologación de los títulos”. Al respecto, sostuvo que “al haber facilidades en la certificación y de seguir con los aranceles que se pagan en este momento en la Argentina, si ya se están yendo muchos médicos, se van a ir muchos más”. “Realmente sí es un tema preocupante”, indicó.
Al mismo tiempo, Brogliatti destacó: “Por el otro lado, es bueno saber que nuestras universidades son reconocidas internacionalmente y que nuestros títulos son reconocidos en el exterior”.
¿Éxodo?
Esta medida podría significar tanto una oportunidad como un desafío para nuestra comunidad médica. Por un lado, facilita la movilidad profesional internacional y reconoce la calidad de la formación de los especialistas. A la vez, podría plantear un escenario de éxodo de expertos si no se gestionan adecuadamente otras condiciones laborales y salariales que puedan competir con las ofertas del extranjero.
“Lo que se reconoce es que nuestros procesos de acreditación son válidos y por eso no van a pedir recertificar los títulos, ya que se certifica que la Argentina cumple los estándares internacionales”, explicaron desde la Secretaría de Educación.
Hasta ahora, los únicos países de la región que habían alcanzado este reconocimiento eran Chile y Colombia. Si bien habrá un monitoreo anual para asegurar la continuidad del cumplimiento de los criterios requeridos, el estatus de reconocimiento es válido hasta el 31 de enero de 2035.
“Este logro resalta el compromiso del Gobierno con la excelencia académica y garantiza que las escuelas y programas de educación médica acreditados en la Argentina cumplen con los requisitos globales de calidad”, destacaron desde Capital Humano.