Un informe de ONU Mujeres revela que las políticas de prestación social, como la atención sanitaria y las pensiones, no están llegando a las mujeres, lo que las hace más vulnerables mujeres y las niñas a la pobreza en todo el mundo. Además, las elevadas tasas de inflación desde 2022 han disparado los precios golpeando con especial dureza a las mujeres.
De la Redacción de EL NORTE
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Mientras el mundo conmemoró esta semana -el jueves pasado- el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, ONU Mujeres publicó un informe que pone de relieve la creciente brecha de género en la protección social. El documento revela que dos mil millones de mujeres y niñas no tienen acceso a ninguna forma de protección social.
A pesar de algunos avances desde 2015, las disparidades de género en la cobertura de la protección social han aumentado en la mayoría de las regiones en desarrollo, “lo que sugiere que los recientes avances han beneficiado desproporcionadamente a los hombres. Esto está poniendo en riesgo el progreso hacia el Objetivo de Desarrollo Sostenible 5 (ODS 5)”.
Pobreza de género
El mismo sitio de noticias de la Organización de las Naciones Unidas describe que “el informe dibuja un crudo panorama de la pobreza de género, mostrando que las mujeres y las niñas están sobrerrepresentadas entre los pobres en todas las etapas de la vida, y que las mayores disparidades se observan durante la edad fértil”.
Las mujeres de 25 a 34 años tienen un 25% más de probabilidades que los hombres del mismo grupo de edad de vivir en la pobreza extrema. Los conflictos y el cambio climático siguen agravando esta desigualdad, ya que las mujeres de entornos frágiles tienen 7,7 veces más probabilidades de vivir en la pobreza extrema que las de regiones estables.
“Además, las elevadas tasas de inflación desde 2022 han disparado los precios de los alimentos y la energía, golpeando con especial dureza a las mujeres. Sin embargo, de las casi 1000 medidas de protección social adoptadas por los gobiernos de 171 países en los meses siguientes, solo el 18% estaban dirigidas a la seguridad económica de las mujeres”, revela el documento.
DESPROTECCIÓN DE LA MATERNIDAD
En todo el mundo, más del 63% de las mujeres siguen dando a luz sin tener acceso a prestaciones por maternidad, cifra que alcanza el 94% en el África subsahariana.
“Esta falta de apoyo financiero durante la baja por maternidad no solo coloca a las mujeres en una situación de desventaja económica, sino que también compromete su salud y bienestar, así como el de sus hijos, perpetuando la pobreza a través de las generaciones”, marcan desde la ONU.
EPÍGRAFE. Un migrante venezolano y su hija realizan reparaciones en su casa de Ecuador. Unicef/Misha Vallejo