En abril, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, promulgó la ley que concede a ByteDance 270 días para venderlo.
El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, insinuó que podría permitir que TikTok continúe operando en el país. Durante un evento organizado por la organización conservadora Turning Point USA en Phoenix, Arizona, Trump destacó el impacto de la aplicación en su campaña electoral y sugirió la posibilidad de mantenerla activa “durante un tiempo”.
“Estuvimos en TikTok, y tuvimos una gran respuesta. Tuvimos miles y miles de millones de visualizaciones”, afirmó Trump. Según el presidente electo, un gráfico que le presentaron evidenció el alcance que su campaña logró en la plataforma. Estas declaraciones llegan en un momento en que TikTok enfrenta un posible bloqueo por motivos de seguridad nacional.
TikTok en el centro del debate legal
El miércoles, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos aceptó revisar una petición de TikTok y su empresa matriz china, ByteDance, para bloquear una ley que exige la venta de la aplicación antes del 19 de enero, o enfrentar una prohibición. El caso plantea cuestiones sobre la libertad de expresión, ya que TikTok argumenta que la medida infringiría la Primera Enmienda.
La audiencia está programada para el 10 de enero, donde se discutirán los posibles impactos de la prohibición. TikTok advirtió que esta acción cerraría una plataforma crucial para millones de estadounidenses el día antes de la investidura presidencial, silenciando voces que utilizan la app para debatir sobre política, comercio, arte y otros temas de interés público.
Un futuro incierto
La controversia se remonta a abril, cuando el presidente Joe Biden promulgó una ley que da a ByteDance 270 días para vender TikTok, alegando preocupaciones de seguridad nacional. Si la empresa no cumple, operadores como Apple y Google se verían obligados a retirar la aplicación de sus plataformas.
En mayo, TikTok demandó al Gobierno estadounidense, calificando la posible prohibición como inconstitucional. Sin embargo, a principios de diciembre, el Tribunal de Apelaciones de Washington, D.C., desestimó esta demanda, intensificando la batalla legal.
El futuro de TikTok en Estados Unidos sigue siendo incierto, mientras el debate legal y político continúa, y Trump parece dispuesto a reconsiderar su papel en la controversia.