El tenista número uno del ránking ATP, el serbio Novak Djokovic, se perderá el Abierto de Miami de la próxima semana después de que se le denegara una exención que le habría permitido entrar en Estados Unidos pese a no estar vacunado contra el COVID-19.
“Intentamos que a Novak Djokovic se le permitiera obtener una exención, pero no pudo ser”, informó el director del torneo, James Blake, a Tennis Channel.
“Obviamente, somos uno de los principales torneos del mundo, nos gustaría tener a los mejores jugadores que puedan jugar. Hicimos todo lo que pudimos. Intentamos hablar con el Gobierno, pero eso no está en nuestras manos”, indicó.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, y los dos senadores estatales fueron algunos de los que pidieron al Gobierno de Joe Biden que permitiera a Djokovic, número uno del mundo, entrar en Estados Unidos y competir en el torneo que ha ganado seis veces.
Djokovic, de 35 años, también se perdió el Masters de Indian Wells (California) por no haber podido conseguir la exención.
Estados Unidos prohíbe actualmente la entrada en el país a los extranjeros no vacunados, una política que se espera que se levante cuando el Gobierno ponga fin a sus declaraciones de emergencia por el COVID-19 el 11 de mayo.
Djokovic, que se perdió el Abierto de Australia del año pasado tras ser deportado de ese país debido a su estado de vacunación, ha dicho que se saltaría Grand Slams antes que inmunizarse contra el COVID.
En enero ganó su Grand Slam número 22 en el Abierto de Australia.