La distorsión generada por el esquema de subsidios al transporte público es brutal. Hoy viajar en San Nicolás resulta más barato que hacerlo en el AMBA, aunque a partir de marzo será casi tres veces más caro si tenemos en cuenta que el boleto plano que aquí hoy cuesta $266 pasará a $690, mientras que en el Área Metropolitana de Buenos Aires tiene un valor de $270. En el ranking de municipios con tarifas más elevadas San Nicolás ocupará el segundo lugar a partir del mes próximo, detrás de Pergamino ($751), aunque en los próximos días se esperan incrementos en la mayor parte de las jurisdicciones.
De la redacción de EL NORTE
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La histórica discrecionalidad en el esquema de subsidios al transporte público se profundizó con la decisión del Gobierno nacional de eliminar el Fondo Compensador a las empresas de transporte público del interior del país, una política que derriba todo concepto de federalismo puesto que los subsidios al Área Metropolitana de Buenos Aires se mantienen intactos.
Esa distorsión generó –en los últimos años- que los usuarios del interior pagaran un boleto desproporcionadamente más caro que los del AMBA. Aunque, paradójicamente, desde hace un par de semanas esa relación se invirtió: hoy viajar en San Nicolás resulta más barato que hacerlo en el AMBA: $266 contra $270. Surrealista.
Pero este escenario sólo regirá un par de semanas más, puesto que a partir de marzo, digamos, las cosas volverán a la normalidad: mientras los usuarios de AMBA seguirán pagando $270, los de San Nicolás deberán pagar $690 el boleto plano.
La decisión de eliminar el Fondo Compensador del Interior (FCI) profundiza las desigualdades, y genera a futuro todavía más inequidad.
El FCI repartió el año pasado $102 mil millones destinados a cubrir parte del valor del boleto del transporte público de pasajeros en localidades del interior del país. Este régimen comenzó en 2007, pero en 2019 se modificó el sistema y se acordó que las provincias debían aportar parte de los subsidios.
En enero de 2024 (antes de los aumentos dispuestos por el Gobierno) un boleto promedio en el interior costaba 3,1 veces más que el boleto mínimo que se pagaba en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Actualmente, los subsidios se determinan según los costos operativos de las empresas (gasoil, mantenimiento de las unidades y salarios) y la recaudación por la venta de pasajes. En septiembre pasado, el Gobierno nacional sostuvo, a través de los subsidios, el 85,4% del boleto.
El grueso de los subsidios al transporte se destina a empresas del AMBA: según los datos oficiales para 2022 (último período con información completa), del total de $235 mil millones otorgados, el 78,2% se concentró en la región metropolitana y sólo el 21,8% fue para el interior.
El Fondo Compensador del Interior repartió el año pasado $102 mil millones, destinados a cubrir parte del valor del boleto del transporte público de pasajeros en localidades del interior del país. Estos recursos se eliminan en 2024.
Cómo funcionaba el FCI
El Fondo Compensador se encargaba de subsidiar al transporte público de pasajeros por automotor urbano y suburbano del interior del país a través de transferencias realizadas desde el Estado Nacional a empresas prestatarias del servicio público de transporte para permitir que las tarifas sean provistas a un costo inferior al necesario para cubrir los costos de funcionamiento y mantenimiento.
En el interior del país el subsidio nacional se distribuye un 50% por cantidad de líneas, y el otro 50% por kilómetros recorridos. No se tomaba en cuenta la estructura de costos de las empresas.
A diferencia de lo que ocurre en el AMBA (donde sólo el Estado nacional aporta subsidios a través de aportes del Tesoro, y antes de los aumentos aplicados en enero cubría el 90% del valor del boleto), en el interior del país también las provincias y los municipios se hacen cargo de parte de los subsidios, como se explica en esta nota.
Ranking
Además de lo que ocurriera en San Nicolás, la actualización tarifaria del transporte público en Pergamino también es un hecho, luego de aprobarse el despacho de la mayoría con 13 votos afirmativos, en el Concejo Deliberante de aquella ciudad.
Desde marzo el boleto de colectivo en Pergamino costará un 50 por ciento más caro ya que pasará de $500 a $751,15. Asimismo quedó aprobado un Plan de Contingencia de 180 días en el que se incluye una actualización tarifaria bimestral.
Así, según el ranking elaborado por la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), Pergamino tendrá a partir de marzo el boleto plano más caro ($751), seguido por San Nicolás ($690). Aunque se espera que en los próximos días muchos distritos avancen con aumentos de similares proporciones.