Un auxiliar de la Comisaría 49 es el primer sospechoso del caso, por su presunta complicidad con los delincuentes que perpetraron el hecho. Qué declaró para quedar complicado en la investigación.
El millonario asalto en la sede del Correo Argentino de Maipú, Mendoza, tiene su primer detenido. Se trata del policía que se encontraba custodiando la sucursal, pero que ahora los investigadores creen que es un cómplice de los malvivientes que se llevaron cinco millones y medio de pesos.
Fernando Palleres (32), uniformado de la Comisaría 49 que realizaba servicios extraordinarios en el lugar, fue arrestado en la noche del martes por disposición de la Fiscalía de Robos y Hurtos. Su declaración en el hecho, con algunas contradicciones, lo transformaron en sospechoso; trascendió que este auxiliar, días antes había estado haciendo algunas preguntas sobre el movimiento del dinero en las oficinas.
Todo indica que con una serie de pruebas en su contra será imputado en las próximas horas por el fiscal Galdo Andreoni, por el delito de robo agravado. En líneas generales, el policía relató ante sus pares, tras el atraco, que tres delincuentes se presentaron en la institución de Alberdi y España, en el distrito de Fray Luis Beltrán, y le dijeron que eran auditores del Ministerio de Seguridad que debían hacer allí un control sobre sus tareas.
El acusado los dejó pasar, tras lo cual lo redujeron y le sacaron la pistola reglamentaria 9 milímetros. Luego los ladrones armados se acercaron a los empleados del correo, los amenazaron y se hicieron de $5.500.000.
Con ese botín los malhechores escaparon y no han sido capturados. Los pesquisas buscan identificarlos a través de las cámaras de seguridad de la zona, entre otras medidas dispuestas. No descartan que los autores del robo también sean efectivos, debido a la forma en la que se manejaron en la escena.