“No creo que tenga sentido”, evaluó Haroldo Avetta, vicerrector de la Universidad Tecnológica Nacional y decano de la Facultad Regional San Nicolás. La referencia tuvo que ver con el anuncio del Gobierno nacional en torno a la posibilidad de arancelar las carreras universitarias para los estudiantes extranjeros.
De la redacción de EL NORTE
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El vicerrector de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y decano de la Facultad Regional San Nicolás, Haroldo Avetta, expresó a través de Radio U su firme oposición a la medida del gobierno nacional que busca habilitar a las universidades a cobrar aranceles a los estudiantes extranjeros. Según expuso, la propuesta no solo carece de fundamento práctico, sino que podría generar un conflicto con principios constitucionales básicos.
“No creo que tenga sentido y violaría un principio constitucional. Es un tema que depende de la legislación, y si se quiere modificar, deberá pasar por el Congreso”, afirmó el decano, al referirse a la medida que permitiría a las universidades públicas fijar aranceles para los estudiantes internacionales. Para Avetta, la medida no resolvería los problemas de financiamiento que enfrenta la institución y podría tener poco impacto en universidades como la UTN San Nicolás, donde el número de estudiantes extranjeros es notablemente bajo.
Actualmente, la Facultad Regional San Nicolás cuenta con apenas 12 estudiantes extranjeros, sobre un total de 3.000 estudiantes. La mayoría de estos estudiantes llegan atraídos por la proximidad a empresas multinacionales y la oferta educativa, más que por cuestiones relacionadas con políticas migratorias o educativas. “La relación de estudiantes extranjeros es muy baja. Si llegamos a tener 12 estudiantes extranjeros, es porque han venido por otros motivos, como laborales”, explicó Avetta.
Dificultades financieras
La universidad atraviesa serias dificultades financieras, exacerbadas por el aumento de los costos operativos. Avetta destacó la situación delicada del financiamiento de las carreras tecnológicas, particularmente aquellas que requieren una inversión considerable en equipos y laboratorios. “Nos afecta muchísimo el consumo de energía, tanto eléctrico como gas, que no está cubierto por el presupuesto actual. El aumento de un 270% (del presupuesto) para costos de mantenimiento, nos vino bien, pero no alcanza a cubrir ese consumo de energía”, señaló.
A pesar de la difícil situación económica, la UTN San Nicolás ha logrado mantenerse gracias a una gestión y administración eficaz y el apoyo de diversos actores externos. “Nosotros trabajamos mucho con los gobiernos municipales y el sector productivo. Es un trabajo conjunto que nos permite seguir adelante, aún en tiempos de crisis”, comentó Avetta. Este apoyo ha sido clave para mantener la calidad de los servicios educativos, aunque, como admitió, los recortes en otros aspectos, como la renovación de equipos de laboratorio, son inevitables.
En cuanto al panorama a nivel nacional, Avetta expresó su preocupación por la falta de políticas públicas coherentes y sostenibles para las universidades. Según planteó, las decisiones se toman “más en función de intereses políticos” que de una planificación a largo plazo. Sin embargo, también hizo hincapié en el esfuerzo constante que realizan por garantizar la continuidad de las carreras y el bienestar de los estudiantes.
En este sentido, Avetta destacó el esfuerzo de la universidad para ofrecer becas y facilidades a los estudiantes que más lo necesitan. Además, resaltó el trabajo conjunto que llevan adelante con los gobiernos locales y las empresas tecnológicas. Al respecto detalló que esas tareas han permitido la expansión de carreras y la inclusión reciente de Ingeniería en Sistemas.