Desde hace un tiempo, el colegio se planteó un objetivo con dos apuestas: generar una mejora en el medioambiente, pero al mismo tiempo involucrar a los alumnos en ese proceso.
Los profesores del Instituto Ramallo Paula Velázquez, Vanesa Molina, Leonardo Solís y María José Berasain llevan adelante un proyecto coordinado por la directora del Centro Educativo Marisa Santía, junto a los alumnos de cuarto año para cambiar la matriz energética de la escuela.
Desde hace un tiempo, el colegio se planteó un objetivo con dos apuestas: generar una mejora en el medioambiente, pero al mismo tiempo involucrar a los alumnos en ese proceso. Reconocieron en el carbono un problema a resolver. Durante estos meses vienen trabajando en la instalación de paneles solares para generar energía eléctrica. “No intentamos simplemente bajar el consumo, queremos lograr en los alumnos un verdadero aprendizaje y compromiso con el tema. Trabajamos juntos y comprometidos, sabemos que no es fácil, pero vamos avanzando. Es necesario trabajar sobre problemáticas medioambientales y también cambiar la matriz energética dentro de la escuela. Con los alumnos de cuarto año de las dos orientaciones pensando en usar las energías renovables. Tuvimos la oportunidad de empezar a buscar información y visitamos otras instituciones que son abastecidas por energías renovables por energía del sol y con las ganas de los chicos. Los jóvenes están muy interesados porque el proyecto va más a lo pedagógico”, dijo la profesora Vanesa Molina.
Proyecto
En el inicio del diálogo con las profesoras Paula Velázquez y Vanesa Molina, explicaron cómo nació el proyecto. “Visitamos dos escuelas, una en Bella Vista y otra en Devoto. Fueron experiencias muy enriquecedoras y desde dos perspectivas cada escuela llegó a su objetivo. Es un proyecto grande, renovador y muy oneroso, por eso necesitamos de otras instituciones”, explicó la profesora Velázquez.
Por su parte, la profesora Molina indicó: “Los chicos empezaron a buscar información no solo de Internet, sino de experiencias que fueron prestando atención, como paneles solares en hogares, iban, realizaban la consulta y volvían con información; también de observar hogares con termotanques solares. Los chicos están haciendo su propia celda fotovoltaica casera. Van trabajando y van indagando, y buscan que podamos utilizar energía limpia y renovable. El Instituto Ramallo trabaja en varios proyectos vinculados al cuidado del medioambiente”.
“Nosotros hicimos dos presentaciones, una fue el 3 de junio, el proyecto se llama ‘Sol danos tu energía’”. Estuvieron varias autoridades de empresas, gente del Municipio y de la comunidad. Después hicimos una presentación puertas adentro de la escuela. Hoy necesitamos el dinero, hemos creado una comisión para recaudar fondos. Estamos trabajando para conseguir todo el material necesario, por eso apelamos y buscamos el apoyo de otras empresas”, informó Paula Velázquez.
Recurso económico
Posteriormente la profesora Molina agregó: “Tenemos varios presupuestos, pero debemos optar por el que podamos llegar económicamente, el dinero que necesitamos son 12.000 dólares, estamos teniendo diferentes modos de trabajo, una comisión técnica, una comisión para recaudar fondos y otra de gestión. Ganas hay muchas, y también hay muchas ideas. Las empresas lo vieron muy bien al proyecto”.
Más adelante, Paula Velázquez señaló: “Estamos buscando dinero, y queremos hacerlo visible al proyecto para que la comunidad en general lo pueda conocer. Esto le permitiría a la escuela autoabastecerse de energía. Nuestra escuela funciona de lunes a sábados durante todo el día, durante ese lapso podremos autoabastecernos de energía eléctrica, pero también es probable que tengamos que entrar a la red para recibir energía. Sabemos que hay escuelas rurales que cuenta con este sistema y en la zona seríamos la primera que se genera la propia energía. Nosotros somos una institución pública de gestión privada, de la Dirección de Cultura y Educación creo que se puede conseguir algo, y por otro lado, las empresas que se han mostrado muy interesadas”.
Contenidos y realidad
En el tramo final de la entrevista, Vanesa Molina contó: “Hoy participan del proyecto 60 alumnos de cuarto año, pero también quieren sumarse de otros cursos. La verdad es que cuando vimos materializado los proyectos en otras escuelas fue muy lindo. Es muy interesante ver cómo los electrodomésticos funcionan con la energía del sol, y además, vimos a los chicos muy interesados. Trabajan fuera del horario escolar”.
“Para nosotros es importante darle otra vuelta al contenido escolar, genera otro impacto, la verdad es que después de la presentación que tuvimos el pasado miércoles, muchos alumnos se han acercado a querer participar. Fue muy motivador verlo en materia concreta, va más allá de lo que uno pueda dar en el aula”, concluyó Paula Velázquez.
El proyecto
1) Presentación formal del proyecto a toda la comunidad educativa (alumnos, profesores y padres).
2) Análisis del consumo eléctrico del colegio. Saber cuánto y cómo consumía para establecer políticas de reducción y de ahorro energético.
3) Evaluar costos, tiempos y etapas, análisis de las normativas vigentes y posibles formas de financiación.
4) Negociar la conexión del sistema a la red eléctrica.
5) Una vez realizada la instalación, evaluar el impacto real del proyecto.
6) Lograr que los alumnos puedan transmitir sus experiencias y el conocimiento obtenido. Pretender que sirva como modelo para otras instituciones.