Tras el desplazamiento de Oscar Paniza, por una denuncia de corrupción, la Delegación Departamental de Investigaciones de Tráfico de Drogas Ilícitas San Nicolás ya tiene un nuevo comisario al mando.
Este jueves se conoció que el comisario Oscar Paniza ex Jefe y Director de la Delegación Departamental de Investigaciones de Tráfico de Drogas Ilícitas San Nicolás había sido relevado de su cargo hasta tanto se investigue una denuncia en su contra por corrupción.
A raíz de lo sucedido, las autoridades ya designaron a su reemplazante en el cargo. Se trata del Comisario Mayor Darío Perochena, oriundo de la ciudad de Pergamino. Este último asumió su nuevo lugar durante un acto realizado ayer.
Denuncia contra Paniza
La grave denuncia que pesa sobre el Comisario Oscar Paniza a cargo de la División de Tráfico de Drogas ilícitas fue presentada de manera anónima e ingresó vía online este jueves en la UFI descentralizada Nº5 de San Pedro.
Ya desde hacía un tiempo la justicia venía sospechando de que algo raro sucedía luego de que la mayoría de los allanamientos efectuados como consecuencia de las investigaciones repetían sus resultados negativos. Cuando se disponían a profundizar en lo que había detrás surgió la denuncia, supuestamente anónima por temor a represalias. En la presentación se hace referencia a diversos actos de corrupción policial que habrían sido perpetrados por el Comisario Paniza. Ante la gravedad de las acusaciones el jefe del Departamento de Drogas Ilícitas fue separado de su cargo hasta tanto avance la investigación.
Entre las imputaciones efectuadas se encuentran el manejo discrecional y fraudulento de las horas CoRes por las que les exigiría a los agentes que prestaban el servicio adicional un porcentaje del pago, la obtención de dádivas a cambio de acciones u omisiones como así también de brindar información crucial para el desarticulado de bandas delictivas que frustraban las investigaciones. Da cuenta la presentación de algunos detalles de hechos puntuales donde se investigaba en el último año no llegando a encontrar a los vendedores a la hora de allanar y menos aún el material estupefaciente. Lo acusan también de efectuar negociados con el combustible de los patrulleros y de malversar los fondos de la caja chica para su beneficio particular.