Gobernadores del interior se quejaron por las asimetrías con el AMBA en el reparto de subsidios al transporte. Tres mandatarios peronistas cuestionaron la falta de equidad: Omar Perotti, Sergio Uñac y Gustavo Sáenz. Así, coincidieron con el cuestionamiento de fondo que venían haciendo tanto la Unión Tranviarios Automotor (UTA) como la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap).
De la redacción de EL NORTE
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Aunque el paro que afectó a todo el interior del país quedó desactivado (ver pág. 3), el motivo de fondo que propició el extenso conflicto no está resuelto. Ni mucho menos. Ese motivo de fondo tiene un nombre: inequidad. Lo que complicó sobremanera un acuerdo salarial que semanas atrás se alcanzó casi sin tensión en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) es la inequidad en los subsidios que se destinan al transporte público de pasajeros en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, por un lado, y para el resto del extenso territorio nacional, por el otro.
En ese punto vienen coincidiendo desde ya largos meses la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap). Y esa coincidencia volvió a ser patente en el actual conflicto salarial, que pese al reciente acuerdo terminó incluyendo un total de 36 horas de paro: un día y medio sin colectivos en todo el interior del país.
Aun antes de que este martes se conociera que existía un principio de entendimiento entre el gremio y la federación empresarial y antes de que este miércoles ambas partes firmaran finalmente su acuerdo salarial, fueron algunos gobernadores los que aparecieron en la escena. El común denominador: la denuncia de esa inequidad y el reclamo de un efectivo federalismo en el manejo de la cuestión.
Indudablemente, el conflicto reactivó los debates en torno a la inequidad en el reparto de los subsidios al transporte en comparación con los recursos que recibe el AMBA.
Gobernadores
Ante la compleja situación, varios gobernadores peronistas –el dato no es menor– pusieron su grito en el cielo y reclamaron por una mirada de país que vaya más allá de lo declarativo y active políticas públicas con perspectiva federal.
Sergio Uñac, gobernador de la provincia de San Juan, fue uno de los mandatarios peronistas que elevaron su voz ante la paralización del servicio de colectivos.
“Nuevamente San Juan, junto a todas las provincias del país, es rehén por una visión centralista de la Argentina”, advirtió Uñac, al tiempo que pedía a las partes involucradas en la discusión paritaria “apoyar el proyecto que buscará eliminar esta injusta e inequitativa distribución de recursos”.
En esa dirección, explicó que el conflicto del transporte del interior surge “porque el Área Metropolitana de Buenos Aires recibe $26.000 millones por mes del fondo de compensación del transporte, mientras que las 23 provincias, que concentran al 63% de la población argentina, reciben en conjunto solo $3500 millones”, contrastó el sanjuanino.
El gobernador Gustavo Sáenz (Salta) coincidió. “Una vez más, Salta junto a todas las provincias del país padecemos la injusticia de una visión centralista de Argentina. Hace tiempo que venimos reclamando un reparto equitativo de tarifas e igualdad con el AMBA”, explicó.
“Necesitamos un federalismo que se haga realidad, que garantice los derechos de Salta, con una real visión federal, sin mezquindades e injusticias que perjudican a los ciudadanos. Es un momento histórico para que las provincias reclamemos juntas lo que nos corresponde”, agregó el mandatario peronista.
Santa Fe, Buenos Aires
Omar Perotti (Santa Fe) también se metió de lleno en el debate por el federalismo. “No alcanza con declamar el federalismo. El conflicto del transporte del interior es la clara expresión del centralismo en la distribución de los recursos destinados a solventarlo”, advirtió.
“Exigimos avanzar en mecanismos de distribución que permitan eliminar esa costumbre, tan arraigada en nuestro país, de tener ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda”, agregó el santafesino.
El AMBA es en parte porteña y en parte bonaerense. A diferencia de la Ciudad de Buenos Aires, que se resiste a una revisión en la distribución de los recursos destinados al transporte, la provincia de Buenos Aires se ha mostrado abierta a avanzar con las discusiones para garantizar un reparto más equitativo de los subsidios.
“Queremos achicar la brecha entre la tarifa del interior y la del AMBA”, sostuvo tiempo atrás el ministro de Transporte bonaerense, Jorge D’Onofrio, durante una visita a Olavarría. El funcionario de Axel Kicillof remarcó que desde la gestión bonaerense “estamos dando la pelea porque la provincia de Buenos Aires por su extensión tiene dos realidades. Nos pusimos a trabajar en estudiar las estructuras de costos, distrito por distrito”, sostuvo.