Hugo Pernini fue declarado culpable de haber violado a un adolescente cuando tenía entre 17 y 18 años en la Iglesia Luján, de Santa Rosa. En medio del juicio, otro joven que el propio sacerdote había ofrecido como testigo en este juicio también lo denunció por abusos.
Un juez de La Pampa condenó a 12 años de prisión al sacerdote católico Hugo Pernini por el delito de violación reiterada en perjuicio de un adolescente, hechos cometidos en una iglesia de Santa Rosa donde ejercía como párroco en 2007, dijeron este jueves fuentes judiciales.
El juez Gastón Boulenaz condenó a Pernini a 12 años, en sintonía con lo solicitado por la fiscalía, mientras la querella había reclamado 15 años de encierro y la defensa 8, el mínimo de la pena prevista para este delito.
Desde Prensa del Poder Judicial se informó que Pernini fue declarado culpable de haber violado a un adolescente cuando tenía entre 17 y 18 años en la Iglesia Luján, de Santa Rosa, y que tras la presentación de las pruebas y los testimonios fue encontrado culpable del delito de abuso sexual simple, gravemente ultrajante y con acceso carnal, agravados todos por ser ministro de un culto religioso.
En la actualidad, el cura está con arresto domiciliario hasta la finalización del proceso, con control electrónico de vigilancia.
En medio del juicio, y a horas de la condena, otro joven que el propio sacerdote había ofrecido como testigo en este juicio también lo denunció en la fiscalía por abusos que habrían ocurrido en los departamentos contiguos a la Iglesia Luján, en Santa Rosa.
Con las pruebas reunidas durante el juicio oral, Boulenaz descartó la inocencia del sacerdote y sostuvo que los abusos ocurrieron, tal cual había sido la teoría del caso del fiscal Walter Martos.
El juez señaló que Pernini “abusó sexualmente” del joven de 17 años, quien ya había cumplido 18 cuando los abusos concluyeron, determinó el magistrado.
Los abusos ocurrieron entre mayo y diciembre de 2007 en el mismo predio donde está emplazada la Iglesia Nuestra Señora de Luján, más precisamente en los departamentos en los cuales residía el imputado.
Tras señalar que “allí existieron múltiples episodios y que los abusos ocurrieron casi a diario”, el juez sostuvo que “este tipo de abusos fueron reiterados hasta julio de 2007, para luego continuar bajo la modalidad de tocamientos en diciembre”, dijo Boulenaz.