La condena al falso médico es de 5 años y 8 meses de prisión. Pero el fiscal daría su acuerdo para el otorgamiento de libertad condicional, habida cuenta del tiempo que ya cumplió en la unidad de Melchor Romero y con prisión domiciliaria. De todas formas, su defensa apelará la medida.
Finalmente quien fuera acusado en el año 2017 de ejercer ilegalmente la medicina, Guillermo Chauderón, fue encontrado responsable de los delitos de Usurpación de Títulos y Honores, Estafas Reiteradas, Ejercicio Ilegal de la Medicina, Falsificación de Documento y uso de Certificado Falso y/o Adulterado; Suministro y Prescripción Indebida de Medicamentos Todos en Concurso Real e Ideal.
Por estos actos ilegales la Justicia lo condenó a la pena de cinco años y 8 meses de prisión efectiva, sumado a la inhabilitación especial para el ejercicio de la medicina por el término de 8 años. No obstante, estaría en condiciones de acceder al beneficio la libertad condicional, habida cuenta del tiempo del periodo de encierro que ya cumplió en la unidad penal 34 de Melchor Romero y, también, en prisión domiciliaria.
La causa se había originado en el año 2017 a raíz de una denuncia anónima. Durante cuatro años Guillermo Chauderón estuvo en ejercicio como Jefe de Guardia del Sanatorio de la UOM en San Nicolás, sin que se advirtiera de que no tenía el título.
Maniobra descubierta
Para un programa de concurrencia médica, el sanatorio de la UOM necesitaba el aval del Colegio de Médicos del distrito 6 de la provincia de Buenos Aires. Le envió una lista a la entidad en la que incluía a Guillermo Chauderón y la respuesta fue que no aparecía en el sistema. Mientras el sanatorio le exigía al falso médico el título para corroborar si existía una irregularidad, el Colegio recibió un llamado anónimo: una denuncia de apropiación de firma y matrícula en el mismo centro médico.
Desde la dirección del sanatorio explicaron que Guillermo Chauderón “siempre dijo que las matrículas eran de él”. Cuando se lo intimó a presentar el título, contestó: “Lo perdí en la inundación de La Emilia”.
Tras hacerse pública la estafa, intentó quitarse la vida, efectuándose varias puñaladas y fue atendido en el mismo lugar donde se desempeñaba como falso título.
Chauderón firmaba como ‘Médico del Servicio Clínica Médica FNSR (Fundación Nuestra Señora del Rosario)’ y tenía 2 matrículas: MN: 142.198 y MP: 57.697. “La primera correspondía a una mujer y la segunda a un médico de apellido Galván que trabajó en Luján hasta 1998 y cuando se fue a vivir a Neuquén pidió la baja”, según se había informado desde el Colegio de médicos distrital.
Autorizado a estudiar
Estando preso, Guillermo Chauderón fue habilitado para rendir los exámenes y finalizar sus estudios en la Universidad Nacional de Rosario.
Tras ser detenido en la Unidad Penal 34 de Melchor Romero, en 2017, Chauderón había sido beneficiado con el arresto domiciliario para estudiar las materias que adeudaba. La autorización fue otorgada a su abogado defensor Dr Jorge Lima por la Cámara de Apelaciones integrada por los doctores Moreno, Alomar y Martínez.
Guillermo Chauderón, imputado por el ejercicio ilegal de la medicina, terminó de rendir dos materias en la Facultad de Medicina en Rosario que le habían quedado pendientes.
El pedido para terminar la carrera fue realizado por su abogado en primer lugar a la Jueza de Garantías María Eugenia Maiztegui quien se lo negó. Siendo luego apelado por Lima ante la Cámara de Apelaciones en lo Penal.
