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jueves, diciembre 12, 2024
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CAME consignó una contracción de la industria metalúrgica en septiembre

La Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) dio cuenta de una “significativa contracción” durante el mes de noviembre en el sector productivo de los metálicos, maquinarias, equipos y material de transporte.

“La producción tuvo una significativa contracción anual de 8,1% a precios constantes, acumulando una disminución de 1,6% en el año. En la comparación mensual, se registró una caída de 1,8%. Las industrias operaron al 70,9% de su capacidad instalada, casi un punto abajo del 71,7% de agosto”, consignó el reporte de la entidad en su Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP).

El informe agregó: “El sector se vio muy perjudicado por la situación macroeconómica del país. La inestabilidad cambiaria, el corte del financiamiento de los proveedores, las dificultades para girar pagos al exterior son algunos de los problemas mencionados por las pymes. Según explicaron algunos empresarios, la inversión en maquinarias y equipos fueron una opción de resguardo, pero no alcanzó para salvar los resultados del mes”.

En el global de todos los sectores, la producción de la industria manufacturera pyme bajó 6,4% en septiembre frente al mismo período del año pasado. Fue el cuarto mes consecutivo en que la actividad se retrae. En total, acumula una caída de 0,8% en los primeros nueve meses del año. En la comparación mensual, la producción se mantuvo sin cambios.

“Durante septiembre, las empresas trabajaron con 73% de su capacidad instalada, prácticamente en los mismos porcentajes que agosto. La incertidumbre política y económica puso en compás de espera inversiones programadas, y eso afectó la capacidad productiva de algunas fábricas”, indicaron.

Por otra parte, se acentuaron los problemas para obtener materias primas y otros insumos. Las empresas encuestadas tampoco consiguieron repuestos de maquinarias y debieron demorar o reducir escalas de producción. La cadena de pagos fue un problema constante: por temor a las disparadas de precios, los proveedores solicitaron pago contado e incluso anticipado para entregar mercadería, condiciones que las pymes no pudieron cumplir.