Matías Olivero Vila, presidente de la ONG Lógica, celebró la reglamentación de la ley que obliga a las empresas a desglosar los impuestos que componen el precio final del producto. En diálogo con Radio U destacó que, con esta medida, los consumidores podrán conocer el “verdadero impacto fiscal en sus compras”, un paso clave hacia una mayor conciencia y responsabilidad ciudadana.
De la redacción de EL NORTE
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A partir del 1° de enero de 2025, los consumidores argentinos verán un cambio fundamental en sus tickets de compra: el desglose detallado de los impuestos que componen el precio final de los productos y servicios. Esta histórica medida, que forma parte del Régimen de Transparencia Fiscal al Consumidor, fue impulsada por la ONG Lógica, presidida por Matías Olivero Vila, y es el resultado de años de trabajo y persistencia.
En una entrevista en Radio U, Olivero Vila expresó su satisfacción por la reglamentación de la ley, que busca terminar con un sistema donde los impuestos eran “ocultados” al consumidor, lo que contribuyó a la falta de conciencia fiscal en la sociedad. “Ojos que no ven, bolsillo que no siente. Solo de esa manera llegamos a tener los impuestos más altos del mundo y la inflación más alta”, señaló el presidente de Lógica, refiriéndose al histórico encubrimiento de los impuestos en las facturas.
El proyecto, que nació en 2022 como una iniciativa ciudadana, había sido presentado en su momento a los precandidatos presidenciales. Entre los que avalaron la idea estuvo Javier Milei, quien, ya en el gobierno, lo incluyó en la Ley de Bases. “Este cambio marca un antes y un después. Conocer los tributos que estamos pagando empoderará al ciudadano y nos permitirá exigir un gasto público más racional y adecuado”, comentó Olivero Vila.
A partir de enero, las grandes empresas estarán obligadas a discriminar en sus tickets los impuestos nacionales indirectos, como el IVA. La normativa se implementará en dos fases: en la primera, que comienza en enero, afectará a grandes comercios como supermercados, estaciones de servicio y cadenas farmacéuticas. Para el resto de los comercios, habrá un plazo hasta el 1° de abril de 2025 para adaptarse. “Lo que buscamos no es una reducción o aumento de impuestos, sino mostrar la verdad de lo que estamos pagando. Esa es la gran diferencia”, subrayó Olivero Vila, destacando que el principal objetivo es transparentar la carga fiscal.
La ley, reglamentada por la Agencia de Control y Recaudación Aduanera (ARCA), establece que los consumidores no deberán hacer ningún trámite adicional. El cambio será visible en las facturas y tickets de compra, que incluirán la leyenda “Régimen de Transparencia Fiscal al Consumidor (Ley 27.743)” y un desglose de los impuestos que componen el precio final del producto. En aquellos casos de facturación electrónica, el desglose será automático. “Lo que estamos haciendo es darle al consumidor la oportunidad de entender cómo los impuestos afectan directamente a su bolsillo”, afirmó Olivero Vila.
Mayor participación ciudadana
El proyecto tiene un impacto que va más allá del simple desglose de impuestos. Según el presidente de Lógica, el cambio busca fomentar una mayor participación ciudadana en la gestión pública. “Cuando la gente vea lo que realmente paga en impuestos, empezará a exigir más transparencia y eficiencia en el uso de esos recursos”, explicó. Este proceso de transparencia, que comienza con los impuestos, podría generar una cadena de demandas por una mayor claridad en el gasto público, similar a lo ocurrido en Brasil con la implementación de un sistema de transparencia fiscal en 2012.
Para Olivero Vila, el trabajo de Lógica no termina con la aprobación de esta ley. “Estamos trabajando en nuevas iniciativas para seguir impulsando una gestión fiscal responsable y eficiente. Ya estamos analizando otros aspectos, como la transparencia en las tarifas de servicios públicos y en la facturación de impuestos provinciales y municipales”, anticipó.
Este logro es solo el comienzo de un cambio cultural en Argentina. La implementación de esta ley no solo hará más visible la carga tributaria, sino que también potenciará el poder de los consumidores al exigir una administración más eficiente y justa de los recursos públicos. Como concluyó Olivero Vila, “estamos ante una oportunidad única para transformar el sistema fiscal y hacer de nuestro país un lugar más lógico y justo para todos”.