El delantero colombiano ex jugador de River marcó tantos en cuartos, semis y en la final, donde también anotó el penal del triunfo frente a Rangers.
Frankfurt hizo historia: venció por penales al Rangers de Escocia, tras igualar por 1-1 en los 120 minutos en la final en Sevilla, y se coronó campeón de la Europa League. Un torneo inolvidable para el conjunto alemán y también para Rafael Santos Borré, el gran héroe.
El delantero colombiano disputó los 13 encuentros del equipo en el certamen continental y fue clave en la recta final: anotó goles en cuartos de final (un golazo contra el Barcelona, en el Camp Nou) y en la semifinal frente a West Ham, nada menos.
A su vez, fue uno de los grandes protagonistas en la final por el título: anotó el gol del empate parcial y luego anotó el gol en el penal decisivo para festejar la coronación en la Europa League. Una jornada a pura emoción en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán de Sevilla.
De esta manera, el equipo alemán rompió una sequía de 42 años sin logros a nivel europeo, luego de su consagración en 1980 en este mismo certamen, que en aquel momento se denominaba Copa UEFA.
Además, el atacante colombiano fue titular en todos los encuentros que disputó el Eintracht en este torneo continental, el segundo en importancia por detrás de la Champions League.