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sábado, noviembre 23, 2024
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Barbie: entre la narrativa feminista y el ícono estereotipado

CONTEXTO, GUIÑOS Y UN PERSONAJE QUE SE APROXIMA A UN MUNDO REAL

La película de Greta Gerwig revolucionó la industria, al igual que la muñeca Barbie cuando salió al mercado. Las relaciones de poder, el feminismo, la masculinidad y las representaciones sociales aparecen en la pantalla grande creando una narrativa sutil, graciosa y efectiva para el feminismo americano.

Judith Coronel
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El fenómeno Barbie llegó a los cines del país. Adolescentes y adultos disfrutan de una sátira que promete ser la estrella del año. Con looks completamente inspirados en la muñeca, con al menos alguna prenda o accesorio rosado, y una publicidad nunca antes vista para la industria del cine, la icónica muñeca es amada por casi todo el público.

Con la dirección de Greta Gerwig y protagonizada por la actriz australiana Margot Robbie, el film propone un abordaje de ciertas problemáticas sociales actuales; eso sí, con una óptica de feminismo anglosajón. La directora lleva mucho tiempo defendiendo la voz de las mujeres a través de sus creaciones con comentarios sociales y una narración sutil pero reflexiva. Con humor, propone revisar los clichés en los que siempre estuvieron envueltos tanto Barbie como Ken.

GIRO DISCURSIVO

En 1959, la icónica muñeca llamada Barbara Millicent Roberts –popularizada como “Barbie”– irrumpió en las góndolas del mercado estadounidense y cambió el objeto de juego de las niñas que hasta ese momento se limitaban a bebés de plástico o porcelana. Para la época, significó un giro discursivo, ahora las niñas ya no jugaban a maternar, sino que tenían una representación de una mujer que podía ser presidenta, abogada, doctora, o lo que quisiera. Cambió de cierta forma la perspectiva de la representación de las mujeres.

Así con el paso del tiempo –y de la historia–, se consolidó como un ícono de culto y como objeto de críticas, ya que instauró ciertas pautas de socialización femenina idealizadas pero no reales.

Es que la película, catalogada para mayores de 13 años, lejos tiene algo que ver con el mundo Barbie tal y como lo conocíamos hasta ahora, introduce con frescura y humor varios temas clave: la salud mental, el patriarcado, la masculinidad, el feminismo. En la película, la icónica muñeca se enfrenta a contradicciones emocionales, crisis existenciales –el sentido de la vida y la incógnita de la muerte–, depresión y otros cuestionamientos que la llevan a buscar el origen de todos los problemas en un necesario viaje a un mundo (casi) real que deja atrás su vida de plástico. Este es un claro guiño a los cuestionamientos, controversias y polémicas que por años recibió Mattel, la empresa creadora.

‘FEMINISMO BLANCO’

Parte del público sale de la sala fascinado con la puesta en escena y bastante conforme con el mensaje que pretende dejar. Sin embargo, para algunas personas no es lo que esperaban. La idea de feminismo tal y como la concebimos en Latinoamérica no está presente en la película. Esto se debe a que en esta región del mundo son otras las variables, como la situación económica, la violencia y la sociedad en conjunto que conforman un movimiento crítico con múltiples aristas.

Desde esa perspectiva, puede que por momentos sea un discurso un tanto débil, ya que para el feminismo latinamericano se nutre de contextos complejos y pluralidad de voces que tejen un metadiscurso que no solo involucra a la cuestión de género.

El largometraje apunta a un público variado, por lo que la forma de exponer los temas es a través del juego de roles y las relaciones de poder explicitados en un guion ágil y sutil.

Más allá de esto, la habilidad de adaptación del discurso a la pantalla grande es efectivo y claramente planea seguir rompiendo récords.