“La convocatoria aspira a que todas las regiones se encuentren representadas, ya que todas fueron afectadas en mayor o menor medida, por las decisiones del Gobierno. Asimismo, se busca que tengan presencia todos los sectores productivos cuya actividad resulta perjudicada”, instan en un comunicado. Hasta el momento, confirmaron su presencia asistentes de más de 100 localidades de 15 provincias.
De la Redacción de EL NORTE
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Productores de alimentos de la región convocan a una movilización y reclamo nacional del que San Nicolás será epicentro. La iniciativa para la jornada del próximo viernes 9 de julio desde la mañana a la vera de la Autopista a la altura de San Nicolás proviene de autoconvocados de la región “en defensa de la producción y el trabajo”.
Los organizadores sostienen que la actividad se perfila como una jornada federal, dado que hasta el momento confirmaron su presencia asistentes de más de 100 localidades de 15 provincias.
Si bien se espera que el grueso de la concurrencia sea de la provincia de Buenos Aires, seguido por otras cercanas, como Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, algunos asistentes viajarán más de 1200 km para llegar al encuentro. Es el caso, por ejemplo, de algunos productores agropecuarios de Salta. Casi a la misma distancia se encuentra Cipolletti (Río Negro), en donde se formó una delegación de empresarios de turismo, gastronómicos, comerciantes y propietarios de pymes que viajarán a San Nicolás en representación.
Convocatoria abierta
La convocatoria –según indican– aspira a que todas las provincias, o al menos todas las regiones, se encuentren representadas, “ya que todas fueron afectadas, en mayor o menor medida, por las decisiones del Gobierno. Asimismo, se busca que tengan presencia todos los sectores productivos cuya actividad resulta perjudicada: productores de alimentos, prestadores gastronómicos, hoteleros, transporte y turísticos, industriales, comerciantes, educadores, constructores, trabajadores de la salud, miembros de la industria del entretenimiento, profesionales de diversas disciplinas, en resumen, todos aquellos que sostienen, con su esfuerzo, los privilegios y caprichos de la clase política.
Finalmente, la convocatoria está abierta también para todas aquellas personas que, más allá de su actividad económica, consideren afectados sus derechos en calidad de ciudadanos, pues la producción y el trabajo no pueden prosperar en un marco que no contemple el libre ejercicio de la ciudadanía”.
Política fiscal y económica
“Si el Gobierno argentino no da un giro de 180 grados en su política fiscal y económica, miles de pequeñas y medianas empresas se sumarán a las que ya cerraron, y millones de argentinos engrosarán el número de desempleados. Por este motivo, convocamos a todos los ciudadanos, de todos los rubros y actividades, a sumarse a esta movilización. No es una marcha por el campo, sino por todos los argentinos honestos y trabajadores que aspiran a algo más que vivir de la limosna del Estado. No permitamos que las ambiciones y caprichos de unos pocos sellen el destino de una Nación que tiene todo para ser grande, próspera y libre. En diciembre de 2019, a pocos días de asumir, el actual Gobierno inició su campaña contra el campo con un aumento repentino de retenciones. En aquella ocasión, como en tantas otras, los productores empezamos la lucha para defender el fruto de nuestro trabajo. Pero, pocos meses después, la pandemia golpeó nuestro país, y decidimos postergar la pelea para aportar a la patria haciendo lo que mejor sabemos hacer: producir. ¿Cómo retribuyó el Gobierno este gesto? Con desdoblamiento cambiario, el intento de expropiación de Vicentin, el cupo de exportación del maíz, el apoyo a Grabois y los suyos ante la usurpación de campos, el cierre de la exportación de carnes, y el eterno discurso anticampo al que nos tienen acostumbrados. Pero sería un error creernos las únicas víctimas de la política antiproducción del Gobierno”, argumentaron los autoconvocados.
“Pandemia como excusa”
“El 2020 nos demostró que no son enemigos del campo, sino de cualquiera que quiera vivir sin depender del Estado. Todos los argentinos trabajadores y productivos resultaron perjudicados por diversas medidas que obstaculizan o impiden su actividad, impuestas para obtener un rédito político, sostener un relato o frenar las consecuencias de una pésima gestión económica y sanitaria. Desde el cierre indiscriminado de muchísimas actividades, los controles de precios o la excesiva carga impositiva, hasta un discurso que tolera y alienta los avances contra la propiedad privada, el Gobierno parece haber declarado la guerra a los trabajadores y a las pymes desde el primer día”, agregaron.
Los productores de alimentos que lanzaron la convocatoria para la movilización del interior para el 9J consideraron que con “la pandemia se transformó en la excusa perfecta para los sucesivos fracasos oficiales”. “Pero la recesión, la inflación y el desempleo estaban garantizados desde mucho antes. El coronavirus aún no había tocado suelo argentino cuando se impusieron las primeras medidas contra el sector productivo. Si el Gobierno argentino no da un giro de 180 grados en su política fiscal y económica, miles de pequeñas y medianas empresas se sumarán a las que ya cerraron, y millones de argentinos engrosarán el número de desempleados. Por este motivo, convocamos a todos los ciudadanos, de todos los rubros y actividades, a sumarse a esta movilización. No es una marcha por el campo, sino por todos los argentinos honestos y trabajadores que aspiran a algo más que vivir de la limosna del Estado. No permitamos que las ambiciones y caprichos de unos pocos sellen el destino de una Nación que tiene todo para ser grande, próspera y libre”, manifestaron los organizadores de la protesta el próximo viernes.
