La canción, que suena en todas las escuelas para homenajear a la bandera argentina, tiene una historia que no todo el mundo conoce.
Nació como aria (es un subgénero musical dentro de la ópera que se caracteriza por no contener ninguna especie de coro) encargada por el Gobierno, fue escrita en italiano y luego se tradujo al castellano. La ópera, del mismo nombre, cuenta un melodrama que transcurre en mayo de 1810 en el que Aurora es una joven, hija del gobernador español de Córdoba, que se enamora de un patriota. La obra se estrenó en 1906 pero su consagración definitiva fue 35 años después, cuando se tradujo al castellano, y el aria se adaptó como canción patria dedicada a la bandera.
La ópera “Aurora” fue compuesta en Milán por el músico Héctor Panizza, y fue encargada por el Gobierno argentino en 1906.
Inspirada en un trágico hecho de la historia local que se cuenta en un relato de Héctor Cipriano Quesada y Luigi Illica, fue compuesta por el autor en Milán y lleva el nombre de su protagonista femenina, que simboliza el nacimiento de la Nación argentina. En tanto, la parte instrumental fue completada en Londres.
“Aurora” fue representada por primera vez en el Teatro Colón el 5 de septiembre de 1908 y en los roles principales estuvieron los cantantes italianos Cesare Assanti, Amedeo Bassi, Giuseppe La Puma y Titta Ruffo, quienes llegaron a la Argentina desde Génova.
La Aurora de la Patria
En resumen, el argumento de “Aurora” cuenta que a un convento de la Compañía de Jesús, en la ciudad de Córdoba, llega un cesto de flores que un fiel devoto envía a la Virgen de los Dolores. En el cesto hay también un mensaje clandestino, enviado desde Buenos Aires: “Muchachos: ¡Saluden a la Aurora! ¡Ella brilla triunfal en el límpido cielo de la Patria! ¡Empieza la lucha por la Independencia!”.
Corre mayo de 1810 y Córdoba continuaba dominada por los españoles. El gobernador Ignacio del Puente había reaccionado con fuerza brutal para restaurar el orden después de la revolución estallada en el Río de la Plata. Pero lo que no sabe es que un joven patriota, Mariano, se ha enamorado de su hija Aurora.
Mariano se bate por Aurora con gran coraje pero es capturado como espía. El gobernador no acepta esa historia de amor y jura la muerte de Mariano.
Los amantes consiguen escapar, pero la historia termina trágicamente, con Aurora herida mortalmente por el fuego de las armas de las tropas de su padre, y con el inmenso amor de Mariano: “¡Te amaré por toda la eternidad, porque el cielo es Aurora, y es Aurora de la Patria!”.
La letra original de “Aurora” es la siguente:
Alta pel cielo, un’aquila guerriera,
ardita s’erge in volo trionfale.
Ha un’ala azzurra, del color del mare,
ha un’ala azzurra, del color del cielo.
Cosi nell’alta aurora irradiale,
il rostro d’or punta di freccia appare,
porpora il teso collo e forma stelo,
I ‘ali son drappo e l’aquila bandiera.
É la bandiera del Paese mio,
nata dal sole; e ce l’ha data Iddio!
Frente a Farrel y Perón
La versión en castellano fue arreglada en 1945 por Ángelo Pettita y Josué Quesada, hijo de uno de los autores, con especial cuidado por respetar la métrica original.
La presentaron la noche de gala del 9 de julio de 1945, en un gran marco de público y con la presencia de las máximas autoridades argentinas de entonces, el presidente Edelmiro J. Farrel y el vicepresidente, el coronel Juan Domingo Perón.
Desde entonces y mediante un decreto gubernamental se estableció que el aria de “Aurora”, con el nombre de “Saludo a la Bandera”, se convirtiera en canción a la Bandera para ser de interpretación obligatoria en los actos oficiales y en todas las escuelas, cuando se iza la enseña nacional.