Hace escasos cuatro años eran muy pocos los países que tenían una inflación de dos dígitos. La situación cambió por la pandemia y la Guerra con Ucrania.
Hace décadas que Argentina viene ocupando primeras posiciones en el ranking mundial de inflación. Hace muy poco tiempo, en un pasado no muy lejano, eran contados los países que tenían una subida de dos dígitos. Sin embargo, esta situación obtuvo una mutación producto de la pandemia y la Guerra con Ucrania.
Este problema es mencionado por el FMI en su Panorama Mundial que advierte acerca de la inflación que se detecta en casi todas partes del mundo. El rápido aumento de los precios, especialmente de los alimentos y la energía, está causando graves dificultades para los hogares, en particular para los pobres
pesar de la desaceleración económica, las presiones inflacionarias están demostrando ser más amplias y más persistente de lo previsto. Ahora se espera que esta pérdida de poder adquisitivo mundial alcance un máximo del 9,5% este año antes de desacelerarse a 4,1% para 2024. Se destaca que el encarecimiento de los bienes y productos básicos se está ampliando mucho más allá comida y energía puesto que la “núcleo” (que excluye estos rubros). pasó de una tasa mensual anualizada de 4,2% a fines de 2021 a 6,7% en julio.
Los últimos datos muestran que la inflación mundial pasaría del 4,7 % en 2021 al 8,8 % en 2022 y al 6,5% en 2023. En Europa, Alemania cerraría este año con una inflación de 10,2% y Holanda 12,8%, países que casi no conocían la variación de precios.
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Hace apenas unos años atrás costaba encontrar más de 10 países con índices inflacionarios de dos dígitos, pero, luego de la pandemia, la inflación comenzó a ser un fenómeno más expandido.
Los índices inflacionarios de los primeros 4 países
Zimbabue: 255%
Venezuela: 213%
El Líbano: 142,4%
Argentina: 92,4%