A pesar del anuncio del Gobierno nacional de flexibilizar el cepo sobre las exportaciones de carne anunciado ayer, vigente desde el mes de mayo en principio por 30 días y que luego se fue renovando, algunos analistas esperan un incremento en los precios.
Si bien la decisión del Gobierno nacional de liberar la exportación de vaca conserva y manufactura con destino a China fue bien recibida por el sector, también se cree que no tendrá una incidencia marcada en los valores que se ven en los mostradores. Y hasta se lamentaron el no haber podido aprovecha la suba del 30% que hubo a nivel internacional.
“Si lo que se resolvió es sólo ‘ampliar’ el cupo de exportaciones de vaca conserva a China, manteniendo las restricción de exportación del 50% de lo exportado en el segundo semestre para otras operaciones, el Gobierno afloja el torniquete pero sin eliminarlo; se trata de un avance, pero que luce insuficiente para recuperar la libertad de comercio y la confianza de quienes invierten en producción de hacienda y carne”, consideró el economista del Ieral Juan Manuel Garzón en diálogo con La Nación.
Para el economista jefe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), David Miazzo, “los precios van a aumentar con o sin esta medida por la inflación, que ya viene corriendo y que, encima, el Gobierno ya emitió un billón de pesos en lo que va del año y en las últimas semanas ha generado una emisión de 250.000 millones, descontando lo que va a ser de acá a las elecciones y a fin de año. Eso obviamente va a tener un impacto que va a ser que suba la carne y la suba de todos los productos en general”.
Por su parte, el economista Salvador Di Stefano, consideró que si bien “los gestos del Gobierno por un acercamiento al campo son bienvenidos, las medidas tienen sabor a poco, ya que se sigue esgrimiendo un control de precios, que tienen todas las condiciones para fracasar. Estamos en la obligación de decir que resulta beneficioso la reapertura de las exportaciones, pero de ninguna manera esta medida hará retroceder el valor de la carne en el mostrador. El que avisa no traiciona. En noviembre escaseará la oferta y el precio de la carne aumentará. Es un problema estructural por carecer, en los últimos 45 años, de una política ganadera seria, ya que todas las mediciones que se realizan obligan a informar que, tanto el rodeo como la cantidad de establecimientos, han caído considerablemente”.