El histórico dirigente del sindicato de Camioneros de San Nicolás, Julio Cabaleyro, y el empresario dueño de una distribuidora de golosinas de San Pedro, Ariel Rey, cruzaron diferentes acusaciones. Fue en sendas intervenciones de ambos en medios radiales. Es en el marco de la causa penal por extorsión, por la que el hijo del gremialistsa, Maximiliano, y Fernando Espíndola se encuentran detenidos.
“Maximiliano Cabaleyro era el diablo, cuando viene Fernando Espíndola, que es el secretario sindical del pueblo, decía: ‘Mirá que viene Maxi y se pudre todo, esto es para el quiosquito de Maxi’”, dijo en declaraciones radiales Rey para explicar cómo era el mecanismo de extorsión que denunció ante la justicia, en la Fiscalía Nº 7 de San Pedro, a cargo de María del Valle Viviani.
“Rey es un mentiroso, da lástima en todos lados y no dice la verdad. Puso dos baños químicos en la vereda y los choferes no tienen ni hecho el psicofísico, y en el recibo de sueldo les ponía media jornada trabajada cuando hacían jornada completa. Al final les regalaba una lata de durazno como si fuera la gran cosa”, dijo por su parte Julio Cabaleyro, también en declaraciones radiales.
Tras el allanamiento que se produjo el lunes en la sede central del Sindicato de Camioneros en la ciudad de Buenos Aires en busca de documentación relacionada con los dirigentes presos, Julio Cabaleyro y Rey fueron entrevistados telefónicamente en Radio con Vos. Si bien la idea era que ambos dialogaran al aire, el gremialista se negó y dio su testimonio mientras era escuchado por Rey, para luego terminar con la comunicación.