En consecuencia del cambio de estaciones, el Gobierno dispuso modificaciones en los servicios de luz y gas.
El Gobierno nacional oficializó a partir de octubre y hasta el 31 de diciembre una rebaja del 10% en el precio del gas por la temporada estival, mientras habilitó una suba de casi 3% en el costo de transporte y distribución. Además, informó los nuevos valores del Precio Estacional de la Energía Eléctrica (PEST) que impactarán en las facturas de usuarios residenciales y sectores productivos.
Con esta medida, que busca reflejar los costos reales de producción y garantizar la estabilidad en el suministro energético, se explicó,se esperan que las facturas de gas lleguen desde noviembre con rebajas promedio del 6% en los hogares de todo el país. Esto es, en parte, porque hay además un menor consumo frente a temperaturas más elevadas.
Aunque todavía falta publicar los nuevos cuadros tarifarios para precisar la aplicación de los cambios, la decisión supone una baja del 10,37% para el del gas y una suba del 2,7% al precio de la electricidad. Esto,sin embargo, no se traslada linealmente a las boletas de los usuarios ya que son sólo parte de los conceptos que definen el costo final.
En lo que respecta al gas, la Secretaría de Energía informó la actualización de los precios del gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST). Este cambio supone una reducción del 10,37% en el PIST, que es solo uno de los componentes que forman parte de la tarifa del servicio de gas natural.
Para los usuarios residenciales de ingresos altos (N1) y los sectores productivos, los precios del gas oscilarán entre 2,979 USD/MMBTU (dólares por millón de unidad térmica Británica, o BTU) y 3,148 USD/MMBTU, con un promedio nacional de 3,09 USD/MMBTU. Al igual que con la electricidad, los usuarios de ingresos medios (N3) y bajos (N2) seguirán manteniendo las bonificaciones vigentes establecidas por la Resolución 90/2024.
En cuanto a la electricidad, se determinó el Precio Estacional de la Energía Eléctrica (PEST) para el período de invierno. Según voceros de la Secretaría de Energía, esto implica un aumento del 2,7% en dicho precio. Sin embargo, este incremento no se traslada de manera lineal a las facturas de los usuarios, ya que el PEST es solo uno de los componentes de la tarifa final.
Los valores del Precio Estabilizado de la Energía (PEE), Precio Estabilizado del Transporte (PET) y Precios de Referencia de la Potencia (POTREF) serán utilizados para calcular las tarifas según el nivel de ingresos de los usuarios.
El traslado de estos nuevos valores afectará de manera diferenciada según los segmentos de ingresos. Los usuarios del segmento N1 (ingresos altos) y los sectores productivos, como comercios e industrias, afrontarán un precio que oscilará entre 63.187 y 66.885 $/kWh (pesos por kilovatio hora). Por su parte, los usuarios de los niveles N3 (ingresos medios) y N2 (ingresos bajos) continuarán recibiendo las bonificaciones establecidas previamente por la Resolución 90/2024 de la Secretaría de Energía.