Daniela Pérez, de 28 años y oriunda de Villa Esperanza, había sido hallada muerta en mayo del año pasado en su vivienda de San Miguel. Tenía un golpe en la cabeza. Las pericias revelaron que el deceso se produjo por un traumatismo de cráneo. Algunas versiones apuntaron contra su ex pareja, la justicia caratuló como “accidente”.
De la redacción de EL NORTE
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El cuerpo de Daniela Pérez fue encontrado en los primeros días de mayo de 2023 en su casa ubicada en calle Tapalqué al 60 de Bella Vista en la localidad de San Miguel. Presentaba varios golpes y conforme a las pericias fue precisamente un traumatismo de cráneo el que le ocasionó la muerte. El momento del deceso fue fijado por la justicia en las 2.00 de la mañana del 4 de mayo de ese año. Aunque, más allá de los politraumatismos que hubiesen podido ser provocados por una caída, el cuerpo no habría presentado otros signos de violencia, las versiones de que la joven había denunciado a su pareja por violencia de género llevaron a los investigadores, en principios, a profundizar en las medidas de investigación. La operación de autopsia ordenada por la fiscalía Nº18 de San Miguel a cargo del fiscal Alfredo Mallo habría determinado que la joven murió a causa de un paro cardíaco provocado por golpes. El punto en cuestión para la justicia era determinar si habían sido producidos por un accidente al caerse la joven en la bañera, o por la acción de un tercero.
En ese momento se habría marcado como un punto fundamental establecer la data de muerte de la víctima para determinar la presunta responsabilidad de su pareja, con la que no convivía y que habría sido vista poco antes de que fuera hallada sin vida en la vivienda de la joven. Trascendió entonces que luego de conocerse el dictamen médico el fiscal solicitaría el cambio de carátula de “Averiguación de causales de muerte” a “Femicidio u Homicidio agravado en razones de género”, pero esto no habría ocurrido ya que a un año del hecho no hubo detenidos, ni procesados por la muerte de Daniela Pérez.