La tercera ola de COVID-19 trajo un problema muy grande tras tener una nueva variante circulando más contagiosa que las anteriores. Esta dificultad les llega a los comercios, bares, restaurantes, empresas y hoteles, que deben aguantar sin personal suficiente debido a los contagios. El vicepresidente de la Cámara de Hoteleros y Gastronómicos, Marcelo Fredes, se refirió a las complicaciones que viven desde el sector.
De la Redacción de EL NORTE
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A principios del 2022, la nueva variante del coronavirus, ómicron, comenzó a hacer estragos en la salud de la Argentina. Los contagios empezaron a subir de manera abrupta y hasta llegamos a tener récord de casos en San Nicolás con más de 400 positivos en un solo día. La problemática se volcó rápidamente hacia el sector económico que pende de un hilo.
Muchas empresas, bares, restaurantes u hoteles están teniendo bajas en su personal debido a los contagios. Esta fue una de las razones que llevaron al Gobierno a implementar que los contactos estrechos sin síntomas y con esquema de vacunación completa no deban aislarse.
EL NORTE dialogó con Marcelo Fredes, vicepresidente de la Cámara de Hoteleros y Gastronómicos, quien manifestó que “la mayor complicación que tenemos hoy es la falta de personal en ambos sectores por la cantidad de contagios”.
Fuera de servicio
En medio de esta complicación, hay muchos puestos de trabajo que no son fáciles de reemplazar. Si bien un mozo o runner pueden ser entrenados en pocos días para salir del paso hasta que vuelvan los trabajadores aislados, un cocinero, chef o pastelero es más complicado de sustituir.
“Además de los contagios que nos quitan personal, no es fácil conseguir reemplazos para poder seguir brindando un buen servicio. En el caso de la hotelería, son negocios que tienen que estar 24 horas abiertos, por lo que el servicio debe ser igual todo el tiempo y no podemos dejar a nuestros clientes insatisfechos”, aseguró Marcelo Fredes.
Pase sanitario
Desde el 21 de diciembre que rige el pase sanitario en la provincia de Buenos Aires y desde el sector en cuestión se temía por la falta de comensales, clientes o huéspedes que pudiesen asistir por imponer tal restricción. Sin embargo, Fredes confió que “no hubo bajas en ese sentido porque tenemos una gran parte de la población vacunada”.
“Desde que lanzaron el pase sanitario nosotros le dimos autonomía a los dueños de que lo implementen de la forma que quisiesen. Acá ya estamos tratando de cuidar a nuestra gente, a nuestros huéspedes y comensales. Entonces se dio un poco para que cada uno lo maneje con total autonomía al pase sanitario”, explicó Fredes.
Añadiendo de inmediato que “en cuanto a si puede llegar a complicarnos o no, no creo, porque tenemos porcentajes de vacunación muy altos. Lo que sí exigimos es que nuestros empleados tengan el pase sanitario para poder trabajar, es decir, que estén con dos o tres dosis; desde ya que pedimos a quienes vienen de afuera en los hoteles que nos demuestren que tienen la vacunación para evitar inconvenientes”.
Repunte del sector
Si bien siguen siendo los rubros más golpeados por la pandemia, de a poco van repuntando sus economías, lo que conlleva a que en la ciudad también se esté mejorando en esa línea. “Se está viendo un repunte en la economía, lo que nos pone contentos, pero nos preocupa mucho la falta de personal que te comentaba anteriormente. Sin empleados no hay forma de seguir creciendo”, afirmó Fredes.
“Estamos delante de una de las mejores temporadas turísticas y donde San Nicolás se ha preparado muy bien. Si no fuese por la falta de agua en el río Paraná, nuestra ciudad estaría explotada turísticamente hablando”, aseveró Fredes.
“Esto se debe a lo bien que le está yendo a la parte costera. Sabemos que San Nicolás funciona como posta, es decir, la gente que viene del norte frena acá, nos visita y después sigue hasta la costa. El problema es que no estamos pudiendo brindar el servicio deseado, todo debido a la situación sanitaria y, también, se le sumó ahora esta semana que pasó, las altas temperaturas”, comentó el vicepresidente de la Cámara.
“Las temperaturas elevadas hicieron que no pudiésemos tener la electricidad necesaria para poder estar a la altura de las circunstancias. Es imposible prender todos los aires acondicionados, la gastronomía no puede tener las heladeras encendidas, estamos teniendo un problema gigante por la baja tensión”, explicó.
Todas estas cuestiones llevan a que les sea muy difícil por parte del sector poder tener un repunte más efectivo. Sin embargo, continúan trabajando para que el crecimiento sea lo suficientemente importante para tener más empleados, mejores servicios y una economía más estable que ayude a San Nicolás.