La Policía los encontró sanos y salvos
Luego de una búsqueda de casi cuatro días, la Policía encontró hoy al mediodía a Adrián Zaitsev, el ciudadano ruso de 43 años que se presentaba como “enviado de Dios”, y a su hijo de ocho años. Según informaron fuentes oficiales, se encuentran sanos y salvos.
Según publicó La Mañana de Neuquén, la Policía encontró a Zaitsev pasadas las 12.30 de hoy junto a su hijo Erik de 8 años, cerca del río Neuquén y de la Ruta Provincial 17, camino a Cutral Co.
Adrián Zaitsev es un ciudadano ruso de 43 años que vivió en Uruguay y fue productor de sandías y verduras orgánicas a orillas del río Neuquén, en las cercanías de la localidad de Añelo. En Bolivia habría estado preso por violencia de género, país donde comenzó a presentarse como “enviado de Dios”.
Desde el martes a la madrugada era buscado intensamente por la Policía de Neuquén por tierra y agua después de que se presentara una denuncia por haberse llevado a Erik, su hijo, que vivía con la familia de su exmujer.
Según informó el medio local, fue a raíz de la denuncia radicada el domingo por los tíos del niño, quienes reportaron su desaparición horas después que el ruso intentara acercarse al menor, que comenzó el operativo de búsqueda.
“La guarda del menor la tiene la familia de la madre, desde que la mujer se fue a vivir a Bolivia”, habían explicado a LA NACION fuentes policiales. “Hacía años que Zaitsev no estaba en la zona. Sabemos que se había ido a Bolivia donde habría estado preso. La sospecha es que tendría problemas psiquiátricos y dice ser un mesías, un enviado de Dios”, señaló una fuente de la investigación.