El preso, de nombre Diego Ariel, está privado de su libertad debido a que entregó una carta con dos balas pegadas a un comercio de Villa Gobernador Gálvez. Ahora, le atribuyen ordenar el homicidio de un joven.
Imputaron a un preso de la Unidad Penitenciaria N° 6 de la ciudad de Rosario por dos graves delitos ocurridos en la ciudad de Villa Gobernador Gálvez. En primer lugar, lo arrestaron bajo la acusación de ser el autor de una extorsión que sufrió un comercio, en la que le entregaron una carta con dos balas a los dueños del lugar.
Recientemente, fue imputado por ser quien ordenó el homicidio de un joven. Este ataque resultó fallido, ya que sus cómplices no lo asesinaron e hirieron al chofer del Uber en el que viajaba la víctima. Por este hecho, el juez que intervino le dio 90 días de prisión preventiva efectiva.
Diego Ariel, el preso, se comunicó el pasado 30 de octubre con sus sicarios mediante un celular desde adentro de la Penitenciaria. Debido a esto, ya detuvieron a dos de los cuatros sospechosos, de 19 y 16 años. A su vez, el Ministerio Público de la Acusación y la Justicia de Menores, respectivamente, ya los imputó.
Además de utilizar el celular para dar la orden, lo hizo de manera presencial mediante una mujer que lo visitaba en la cárcel. Verónica Analía, una de las partícipes, fue descubierta y la imputaron junto a las otras personas que están involucradas en este caso.
“Mañana van a activar. No me van a dejar mal, que esto ya es otro nivel. Nada de tirar dos tiros y correr, o de tirar mientras corren. Así, no. Acá, se bajan, activan, se acercan y rematan. Si se cayó, se acercan y lo aseguran”, ordenó el preso a uno de los sicarios, según la conversación de Whatsapp que exhibió el fiscal frente al juez.