Es uno de los entretenimientos del momento y su impacto está en plena investigación por parte de las autoridades. La Cámara Argentina de la Industria del Juguete advirtió sobre su uso.
Luego de una advertencia de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), desde la Justicia y el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se ordenó un procedimiento mediante el cual la Policía porteña secuestró armas de hidrogel y más de 1.800.000 municiones para estos dispositivos.
Es en el marco de una investigación abierta por la comercialización de estos elementos sin los permisos pertinentes, además de que la CAIJ dejó en claro que estas armas, que se venden como juguetes y fueron furor en las últimas Fiestas, pueden generar daños oculares”, “asfixia” y “otras lesiones como hematomas e inflamaciones en la piel”.
Los operativos fueron realizados por efectivos de la División Investigaciones Especiales de la Policía de la Ciudad en conjunto con la Agencia Gubernamental de Control (AGC), la CAIJ y la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba), quienes “certificaron la peligrosidad de los productos ofrecidos a la venta”, se precisó oficialmente.
Así, la Fiscalía de Delitos Complejos de CABA, a cargo de la fiscal Celsa Ramírez, dispuso la identificación y notificación de responsables de los locales inspeccionados como así también el secuestro de 27 armas y 1.842.000 municiones del mencionado material encontradas durante los operativos.
“Las armas con municiones de hidrogel son nocivas para la salud de los niños y niñas”, informaron fuentes con acceso al expediente en trámite.
Se recordó que fue la propia Cámara Argentina de la Industria del Juguete la que advirtió que estas pistolas, en su mayoría importadas y comercializadas online, “no cumplen con las normas de seguridad argentinas” y “no deberían ser usadas por menores de 14 años”.