Santiago Biglieri lleva varias temporadas fuera del fútbol profesional. Con 39 años se volvió a calzar los botines y a vestirse con los colores de su querido Conesa FBC para reforzar al equipo Senior de la institución que participa de un torneo de verano. El jueves en el inicio del certamen el ex delantero de Lanús anotó los dos goles de la Academia en su victoria ante Acevedo por 2 a 0.
Ya lo dijo Carlos Gardel hace casi un siglo en uno de sus memorables tangos: siempre se vuelve al primer amor (fragmento de Volver). Ya no es el niño que sobresalía en los potreros coneseros o en las canchas de Baby de la región a comienzos de los ’90. Su pelo se empieza a pintar con pedacitos de luna. Solo en ese detalle se puede deducir el paso del tiempo en su figura.
Santiago Biglieri fue un destacado futbolista profesional que tuvo Conesa. Brilló en las Inferiores de Lanús, con el que luego se consagraría campeón en Primera División. Fue parte de las selecciones argentinas juveniles en varios procesos en las categorías Sub-15, Sub-17 y Sub-20, en la época de oro de los combinados formativos de la AFA que conducían Pékerman, Tocalli y compañía. Jugó en el exterior (Ecuador, Uruguay y Estados Unidos) y en varios “grandes” del interior de nuestro país (Rosario Central, Instituto de Córdoba y Colón de Santa Fe).
Tras un paso fugaz por Defensores de Villa Ramallo en el Federal “A”, “Saviolita” lleva varias temporadas fuera del fútbol profesional. Con 39 años se volvió a calzar los botines y a vestirse con los colores de su querido Conesa FBC para reforzar al equipo Senior de la institución que participa de un campeonato de verano.
El jueves en el inicio de la segunda edición del torneo “Ruta 188”, el delantero anotó los dos goles de la Academia en su victoria ante Acevedo por 2 a 0. Apenas 30 minutos le alcanzaron para demostrar su calidad y jerarquía. Y para mostrarse vigente.
Tal es así que los dirigentes de Conesa y el técnico Fabricio Ciampichetti se ilusionan con que regrese a las canchas de manera oficial en la Liga Nicoleña como parte del plantel superior de la entidad; el mismo al que le había regalado sus últimas gambetas y desbordes antes de que una lesión lo obligara a parar la pelota.
Por lo pronto, mientras cumple con la función de Guardavidas en la pileta del club de sus amores, este jueves volverá a jugar con el Senior frente a Progresista de Guerrico. Y una semana más tarde hará lo mismo contra el representativo de Peña. Allí seguirá haciendo lo que más le gusta: jugar al fútbol. Una pasión inoxidable.