La refinería Taneco, una de las más grandes y modernas de Rusia, tiene una capacidad de refinación superior a 16 millones de toneladas de petróleo al año y desempeña un papel crucial en el suministro de combustible al Ejército ruso. “La destrucción de refinerías y depósitos de petróleo afecta directamente la capacidad de Rusia para librar una guerra intensa”, declaró Kovalenko.
Ucrania declaró este sábado que atacó con drones la refinería Taneco, ubicada en Nizhnekamsk, Tartaristán, provocando un incendio en la instalación situada a más de 1.126 kilómetros dentro del territorio ruso. Según el teniente Andrii Kovalenko, jefe del Centro para Contrarrestar la Desinformación de Ucrania, se trata del segundo ataque a esta planta en menos de un año.
Imágenes geolocalizadas muestran intensas llamas y humo en el lugar, mientras trabajadores avanzan con dificultad entre la nieve durante lo que parece una evacuación del edificio en llamas. Sin embargo, el servicio de prensa de la República de Tartaristán negó la existencia del incendio y aseguró que las escenas captadas correspondían a un simulacro de evacuación como parte de un ejercicio de seguridad, según CNN. Además, afirmaron que las imágenes de las llamas eran producto del funcionamiento normal de las antorchas de la planta.
La refinería Taneco, una de las más grandes y modernas de Rusia, tiene una capacidad de refinación superior a 16 millones de toneladas de petróleo al año y desempeña un papel crucial en el suministro de combustible al Ejército ruso. “La destrucción de refinerías y depósitos de petróleo afecta directamente la capacidad de Rusia para librar una guerra intensa”, declaró Kovalenko.
En abril de 2024, Ucrania ya había lanzado un ataque contra esta misma instalación, dañando su unidad principal de procesamiento. Según fuentes citadas por CNN en ese momento, dicho ataque alcanzó también una fábrica de ensamblaje de drones Shahed en la región. Este evento marcó el ataque más distante de la frontera registrado en territorio ruso desde el inicio de la guerra.
El gobierno ucraniano sigue intensificando sus operaciones dentro de Rusia, enfocándose en objetivos estratégicos como refinerías y fábricas de drones, en un intento por debilitar la capacidad logística y militar del Kremlin.