El presidente electo alertó a estos países a través de su cuenta de “X”.
El presidente electo, Donald Trump, amenazó con imponer aranceles del 100% a un bloque de nueve naciones si crearan una moneda rival al dólar estadounidense.
“La idea de que los países BRICS están intentando alejarse del dólar mientras nosotros nos quedamos de brazos cruzados observando se acabó”, escribió ayer en su cuenta de X.
Además agregó: “Exigimos que estos países se comprometan a no crear una nueva moneda BRICS ni a respaldar ninguna otra moneda que sustituya al poderoso dólar estadounidense, o se enfrentarán a aranceles del 100% y deberían esperar decir adiós a las ventas a la maravillosa economía estadounidense”.
Las grandes potencias mundiales, China y Rusia, forman parte de la alianza BRICS, junto con Brasil, India, Sudáfrica, Irán, Egipto, Etiopía y los Emiratos Árabes Unidos.
Durante la campaña electoral estadounidense, Trump hizo campaña a favor de la implementación de aranceles generalizados y en los últimos días aumentó sus amenazas de aplicar fuertes gravámenes.
Los principales políticos de Brasil y Rusia deslizaron la idea de crear una moneda BRICS para reducir el predominio del dólar estadounidense en el comercio global, pero los desacuerdos internos frenaron cualquier avance.
Pero algunos aliados de Trump han sugerido que sus recientes anuncios han sido tácticas de negociación, pensadas más como una oferta inicial que como una promesa.
¿Cómo funcionan las tarifas?
Un arancel es un impuesto interno que se aplica a las mercancías que ingresan al país y que es proporcional al valor de la importación. Por ejemplo, un automóvil importado a Estados Unidos con un valor de 50.000 dólares sujeto a un arancel del 25% tendría que pagar un cargo de 12.500 dólares.
Los aranceles son una parte central de la visión económica de Trump, los ve como una forma de hacer crecer la economía estadounidense, proteger empleos y aumentar los ingresos fiscales.
Trump impuso una serie de aranceles durante su primer mandato, muchos de los cuales se mantuvieron en vigor durante el mandato de su sucesor, el presidente Joe Biden. Los estudios económicos sugieren que la mayor parte de la carga económica recayó en última instancia sobre los consumidores estadounidenses.