El traslado es parte de una cooperación internacional para la conservación de la especie. Los felinos estuvieron en cautiverio en Balcarce.
Seis pumas que habían sido víctimas del tráfico ilegal de fauna y vivían en cautiverio en un campo de la localidad bonaerense de Balcarce fueron trasladados a Uruguay, donde encontrarán espacios especialmente diseñados para su cuidado.
La Subsecretaría de Ambiente de la Nación, a través de su Brigada de Control Ambiental (BCA), organizó el traslado. Los pumas rescatados en la Provincia de Buenos Aires serán integrados en programas de conservación y cría en Uruguay, como parte de un acuerdo internacional que busca repoblar la región con grandes felinos, una especie en peligro de extinción en ese país.
El operativo de traslado se desarrolló en el marco de los mecanismos bilaterales de cooperación entre Argentina y Uruguay. Las autoridades uruguayas de la Estación de Cría de Fauna Autóctona de Pan de Azúcar, ubicada en Piriápolis, departamento de Maldonado, y del Bioparque M’Bopicuá de Montes del Plata, en el departamento de Río Negro, habían solicitado a sus pares argentinos la posibilidad de recibir animales incautados en Argentina para fortalecer su plan de preservación.
Ambos centros uruguayos trabajan en programas específicos de cría en cautiverio para el puma, considerado de conservación prioritaria en Uruguay debido a su limitada presencia en la naturaleza. Según las autoridades, los seis ejemplares ya se encuentran en recintos diseñados y ambientados para garantizar su bienestar.
Estos espacios cumplen con los estándares internacionales de manejo y cuidado de fauna silvestre, asegurando condiciones óptimas de alimentación y atención veterinaria para los pumas.
En 2022, Uruguay había enviado un ejemplar de yaguareté a Argentina para un proyecto de reintroducción en su hábitat natural. Ahora, Argentina devolvió el gesto al colaborar en la conservación del puma, una especie que enfrenta desafíos similares de preservación en Sudamérica.