Aunque la cantidad de homicidios en la ciudad registró un marcado descenso en los últimos tres años, la sensación de violencia en la sociedad es mayor. La muerte de un niño de tres años que recibió un balazo cuando jugaba en la calle y el femicidio de la joven Florencia Comas produjeron un fuerte impacto social. En 2022 diez personas fueron asesinadas, cuatro en 2023 y tres en lo que va del año.
De la redacción de EL NORTE
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A casi diez meses desde el comienzo del año las crónicas policiales registraron tres crímenes en la ciudad. A pesar de que este número es menor a los registrados años anteriores, en la conciencia social multiplican su impacto por sus particulares características. Especialmente por la gravedad de las circunstancias que rodean a los hechos.
En 2022 la violencia en San Nicolás alcanzó uno de sus picos más preocupantes con diez homicidios. En 2023 se produjeron cuatro y en lo que va de 2024 se registraron tres asesinatos, pero la sensación de violencia es más fuerte porque son sucesos que tocan las fibras más sensibles de la sociedad.
Se trata del femicidio de una joven de 27 años a manos de una persona de su entorno que compartía con ella la condición de hipoacusia y la muerte de un niño de apenas tres años al quedar en medio de una balacera en una disputa por presunto ajuste de cuentas.
Muerto en disputa barrial
El primero de los hechos que conmocionó a la ciudad este año ocurrió en marzo en barrio San Jorge. Conforme a las primeras investigaciones los sangrientos sucesos se desencadenaron por una disputa entre dos familias residentes en esa franja barrial de la zona norte. Nicolás Vega habría disparado contra Ignacio Franco quien recibió un balazo mortal a la altura del pecho que le ingresó por la axila. El crimen se produjo en las primeras horas de la noche del jueves 21 de marzo cuando integrantes de las familias Franco y Vega habrían decidido dirimir violentamente diferencias de vieja data.
Los hechos tuvieron lugar en cercanías de las calles Carbajo y Nuñez. En ese lugar Ignacio Franco recibió un disparo en la axila que le produjo la muerte poco después. Tras lo ocurrido el hijo del hombre fallecido, de 23 años, efectuó seis balazos hiriendo en ambas piernas a Fabricio Domina (quien acompañaba a Vega).
Respecto de Domina se investigaba también su presunta participación en un asalto con armas a un supermercado chino en el que se llevaron dinero y mercaderías ocurrido en la misma mañana del crimen. Su rostro había quedado registrado en las cámaras del comercio. Luego de establecerse que no tuvo participación en el homicidio fue desvinculado del hecho, pero permaneció con arresto domiciliario por el asalto. Nicolás Vega se encuentra en prisión próximo a ser juzgado.
El femicidio
Florencia Comas, la joven madre de 27 años, desapareció el 12 de setiembre pasado luego de dejar a su pequeña hija en el jardín de infantes y tomar un colectivo de línea. Su cuerpo fue hallado envuelto y atado en un descampado al día siguiente. Las pericias revelaron que había muerto por asfixia mecánica y que había sido asesinada en otro lugar.
La investigación fue compleja, demandó el análisis de las grabaciones de cámaras de seguridad de un prolongado periodo de tiempo en un amplio sector de la ciudad. En principios fueron acusados dos sujetos quienes quedaron desvinculados de la causa luego de la detención de Jonathan Latapie ocurrida seis días después del hecho. Los investigadores sostienen que el hombre de 38 años asesinó a Florencia en una vivienda que refaccionaba en calle Belgrano y luego arrojó su cuerpo en el camino rural. El mismo viernes del hallazgo formó parte de la movilización pidiendo por el esclarecimiento del crimen. Participó portando un cartel con la foto de Florencia reclamando justicia.
Latapie está acusado de haber dado muerte a la joven en una casa ubicada en zona céntrica, haber cargado su cuerpo en una camioneta Peugeot 3008 de color gris, propiedad de su familia, y de haber arrojado su cuerpo atado y envuelto en una sábana en inmediaciones de la planta de tratamiento de residuos.
Días después, fue detenido en inmediaciones del lugar donde los investigadores creen que mató a la víctima. Las imágenes analizadas de las cámaras de un amplio sector de la ciudad obtenidas de los días 12 y 13 de setiembre lo habían registrado encontrándose con Florencia en plaza Mitre, luego entrando con ella a la propiedad de calle Belgrano.
24 horas después las grabaciones lo muestran entrando a la casa con su camioneta y saliendo apenas unos minutos más tarde (los investigadores creen que ese fue el momento en que cargó el cuerpo sin vida de la joven). La siguiente secuencia temporal de imágenes ubicaría al vehículo de color gris en cercanías de la zona donde luego aparecieron los restos mortales de Florencia.
Latapie se encuentra alojado en la Unidad N° 34 Melchor Romero a la espera del dictado de prisión preventiva, lo que ocurriría en la semana entrante.
El crimen de Noah
Noah Emir Romero de 3 años, jugaba en la vereda de su casa el pasado martes en horas de la noche cuando alrededor de las 21 fue alcanzado por una de las balas disparadas por dos sujetos que se trasladaban en moto. Los ocupantes del rodado al pasar por calle Esquiú al 200 efectuaron al menos cuatro disparos.
Tres de ellos impactaron en Marcos Ariel Pino, el destinatario de la balacera, quien recibió heridas en una de sus manos, en la pierna izquierda y en la cadera del lado derecho pero que no pusieron en riesgo su vida. El pequeño Noah, no corrió con la misma suerte.
El menor recibió un impacto en el tórax y aunque fue trasladado a la guardia pediátrica del hospital San Felipe de manera urgente, nada pudieron hacer los facultativos por salvar su vida y falleció a poco de su ingreso. La operación de autopsia reveló que el menor murió a causa de un paro cardíaco producido por el ingreso en el tórax de un proyectil de arma de fuego que quedó alojado en la cavidad pleural.
La madre del menor logró reconocer a los agresores, se trataba de dos sujetos de apellido Gaetán, de 24 y 26 años con frondosos prontuarios policiales por diversos delitos. Aunque en un primer momento se informó que ambos eran hermanos, en realidad se trata de tío y sobrino. Los disparos estaban destinados a Pino con quienes los atacantes tenían conflictos de vieja data.
David Gaetan, alias “Tin” y Leonel Gaetán, alias “Paton” se encuentran alojados en comisarías de localidades vecinas a disposición de la justicia mientras la fiscalía avanza en el pedido de conversión de la detención en prisión preventiva.