Este martes se realizó una importante medida de prueba en el marco de la investigación por tres graves denuncias de abuso sexual contra Walter Solís. Peritos especializados extrajeron información del celular del imputado para ser analizada. Se trata de fotos, videos y comunicaciones mantenidas entre Solís y sus denunciantes. En tanto la fiscalía avanza camino al pedido de prisión preventiva.
De la redacción de El Norte
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Walter Solís fue el primer detenido por el femicidio de Florencia Comas, la joven hallada muerta en cercanías del ENTRE. El hombre de 35 años había sido aprehendido tras ser relacionado con el crimen luego de que el marido de la joven asesinada aportara un video íntimo que databa de mayo pasado en el que aparecía Solís junto a la víctima. Aunque más tarde fue desvinculado de este hecho no fue liberado tras conocerse el tenor de las denuncias presentadas por tres personas que lo acusaban de haber cometido contra ellas delitos aberrantes. La causa por Abuso Sexual con Acceso Carnal (3 hechos) y Abuso Sexual Gravemente Ultrajante en Concurso Real tramita en la UFI Nº14 Tematizada en delitos contra la integridad sexual, ante el agente fiscal Patricio Múgica Díaz.
Durante la mañana de este martes en el marco de la investigación fue peritado el aparato celular del imputado. Del teléfono se extrajeron fotos, videos e intercambio de conversaciones mantenidas entre Solís y sus denunciantes. Todos estos elementos serán analizados y constituirán prueba en la instrucción que avanza rumbo a un eventual pedido de prisión preventiva que debería concretarse la próxima semana antes del vencimiento del plazo.
Walter Solís se encuentra alojado en la UP3 luego de que el Juez de Garantías Ricardo Prati ordenara que permanezca en calidad de detenido mientras se instruye la causa. En principios se había negado declarar, luego pidió hacerlo y negó los cargos, se declaró inocente y afirmó haber mantenido un vínculo con las presuntas víctimas en el que los hechos en controversia se realizaron con el consentimiento de las denunciantes.
Las denuncias
Las denuncias por abuso sexual fueron presentadas el pasado 19 de setiembre en la fiscalía en turno a cargo del agente fiscal Dario Giagnorio y luego derivadas a la UFI Nº14 Tematizada en delitos contra la integridad sexual. Las denuncias son tres, pero los investigadores habían sostenido en ese momento que podía haber más víctimas. Las acusaciones daban cuenta del posible suministro de estupefacientes a sus víctimas para perpetrar los abusos. También se informó que al menos una de las denunciantes habría sido menor de edad al momento de los hechos y que se animaron a denunciar porque se enteraron de que Solís estaba preso.
La justicia se encuentra abocada a la recopilación de pruebas para sustentar el pedido de prisión preventiva que deberá efectuarse a comienzos de la próxima semana. Las denuncias refieren hechos muy graves donde además de los presuntos abusos las denunciantes aseguran haber sido filmadas sin su consentimiento. La fiscalía tematizada había solicitado al Juzgado de Garantías la detención de Solís en orden a los delitos de Abuso Sexual a lo que el magistrado hizo lugar. Solís se encontraba ya preso en la UP3 acusado por el femicidio de Florencia Comas, fue posteriormente desvinculado del hecho pero no recuperó su libertad debido a las nuevas denuncias. Walter Solis fue el primer detenido tras identificárselo en un video privado aportado por el marido de la joven asesinada. Había sido grabado meses antes y mostraban a la víctima junto a un hombre que tenía sus brazos tatuados. A través de testimonios pudieron identificarlo y detenerlo en Rosario.
Se informó entonces que Walter Solís tiene 35 años y es ex empleado de una empresa de instalaciones eléctricas, que es oriundo de Paraná, que estaba radicado en San Nicolás desde hace muchos años y que pasaba gran parte de sus días en Rosario. También se informó que contaba con causas penales en trámite, entre las que se encuentra un acta de procedimiento confeccionada por la policía en el año 2022 en la que constaría que encontraron en su poder sustancias toxicas, entre ellas ketamina.
