La compra conjunta del factor de coagulación VIII, que se aplica en los tratamientos de profilaxis, permitirá obtener precios más competitivos, al reducir los costos en un 90%.
El Ministro de Salud de la Nación, Mario Lugones, mantuvo una reunión con representantes de los laboratorios Bayer y Takeda, empresas ganadoras de la licitación abierta impulsada por la Superintendencia de Servicios de Salud, para acordar la compra conjunta del componente Factor VIII, esencial para el tratamiento de la hemofilia tipo A.
La compra conjunta permitirá obtener precios más competitivos, al reducir los costos en un 90% respecto del valor de mercado. Esto representa un total de 3.200 millones de pesos mensuales, y un ahorro anual que excede los 38.400 millones para las 93 obras sociales que reportaron casos de este tratamiento ante la comisión de Hemofilia de la Superintendencia de Servicios de Salud.
La medida generará una optimización de los recursos y asegurará el suministro continuo del medicamento a quienes lo necesitan. Asimismo, con la logística directa proporcionada por las empresas adjudicatarias, se conseguirá una distribución más rápida y efectiva, beneficiando directamente a los pacientes.
La compra conjunta generará un ahorro del 90%, lo que representa más de $38.400 millones. Con esta licitación abierta se cubre los pacientes que registraron 93 Obras Sociales de un total de 291.
Hemofilia tipo A: ¿qué es el factor VIII?
Según describe el Ministerio de Salud de la Nación, la hemofilia es una enfermedad hemorrágica hereditaria que se caracteriza por la aparición de hemorragias internas y/o externas que se producen por la deficiencia parcial o total de una proteína coagulante denominada globulina antihemofílica.
Hay dos tipos de hemofilia: hemofilia A (deficiencia de factor VIII) y hemofilia B (deficiencia de factor IX). Los factores de coagulación son proteínas de la sangre que hacen que ésta se coagule. Si faltan los coágulos no se forman adecuadamente y la hemorragia persiste.
La administración de estos factores, VIII y IX, puede ser para el tratamiento de hemorragias y/o hematomas o para prevenir estos episodios de sangrado, por lo que, en ese caso, se denomina profilaxis. En el tratamiento de profilaxis se administran regularmente inyecciones con una dosis establecida del factor de coagulación deficiente, de acuerdo al peso, para mantener un nivel aceptable en el torrente sanguíneo.
La profilaxis es el único tratamiento que permite disminuir las hemorragias articulares características en estos pacientes y que los pacientes puedan llevar una vida activa.