Él es Tomás Fuentes Benítez, tiene 31 años, y fábrica snacks saludables de carne que son un éxito en China.
Todo empezó cuando el necochense aplicó a un máster en negocios con docentes de relevancia mundial, de la Universidad Tsinghua, y tuvo la oportunidad de continuar en China el desarrollo de unos snacks de carne proteicos, “Stokes”, que había empezado en Argentina, en el garaje de su casa.
“Es un segmento que en Estados Unidos mueve unos US$2000 millones al año, también están en el Reino Unido, en Canadá, en Australia y yo pensaba ‘por qué no en la Argentina que es el país de la carne’. Los primeros que hice eran horribles, pero un día dejé una bolsa en la alacena y a los dos días estaba vacía. Entonces me dije ‘puede que haya un producto‘”, consideró Fuentes Benítez.
Armó otro ‘laboratorio’ en la habitación de su residencia universitaria, terminó el máster y decidió quedarse en China. Continuó realizando pruebas a su producto, incluso iba a ferias para recibir una respuesta de los consumidores.
Logró ingresar a una cadena de supermercados en Shangai y otra en Beijing, en un mes el snack era “best seller”.
Comenzó a buscar inversores, y finalmente el año pasado se sumaron el futbolista Javier Mascherano y el basquetbolista Yao Ming.
Pese a la situación mundial por el Covid-19, siguieron adelante. Unos meses atrás se sumaron más inversores: los exdueños de la cervecería Quilmes (la familia Bemberg); el chairman de JP Morgan para Asia; Tomás Pierucci, el emprendedor de Bluesmart y Gaston Parisier, fundador de Bigbox.
En total reunió cerca de US$1,5 millones.
Las ventas de los snacks “saludables y altos en proteínas” vienen creciendo al 40% mensual.
Sus productos ya se venden en 750 supermercados chinos y proyecta facturar US$3 millones este año.