Según el informe del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano”, 178 hijos e hijas quedaron sin madre por la violencia machista. El 58 % de los niños son menores de edad y el 56% de los agresores eran parejas o exparejas. Hay que considerar que 24 víctimas habían realizado denuncia y ocho femicidas tenían dictada medida cautelar de prevención.
De la Redacción de EL NORTE
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Un total de 168 mujeres fueron víctimas de femicidios. Tres fueron lesbicidios y dos trans-travesticidios que se produjeron desde el 1º de enero al 31 de julio de 2024.
Según el informe del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano”, 178 hijos e hijas quedaron sin madre por la violencia machista. El 58 % de los niños son menores de edad y el 56% de los agresores eran parejas o exparejas. Además, el relevamiento indica que el lugar más inseguro para una mujer, en situación de violencia, es su vivienda o el hogar compartido con el agresor. La cifra asciende si se consideran las exparejas. El 58 % fueron asesinadas en sus casas.
Hay que considerar que 24 víctimas habían realizado denuncia, 13 tenían indicio de abuso sexual, ocho femicidas tenían dictada medida cautelar de prevención y ocho eran perteneciente o exfuerza de seguridad.
Los datos evidencian que la violencia machista atraviesa el país y es transversal a todas las clases socioeconómicas y niveles educativos.
El Observatorio destacó el caso de Catalina Gutiérrez . “Nos conmocionó y nos asustó, no estamos seguras en ningún lado. Acá no mediaba relación amorosa, ni violencia, ni denuncias y sin embargo Catalina estaba en peligro. ¿Cuáles fueron las señales que no vimos?”, pregunta y suma: “¿Dónde se instala esa personalidad dual de los varones que disimulan su lado violento? Son respuestas complejas con múltiples aristas; lo que sí sabemos es que es imprescindible el tratamiento de las temáticas de género en todos los ámbitos y a todas las edades”.
El informe critica duramente al Gobierno nacional y al presidente Javier Milei. Advierte sobre un “terrible retroceso” en “un relato que sostiene la inversión en políticas para prevenir, asistir y erradicar la violencia es un gasto, desconociendo la forma en que afecta a mujeres, niñas, niños, adolescentes, diversidades y a sus entornos”. “No perdamos el foco: La violencia de género continúa sin disminuir. Nos encontramos ante la realidad de un Poder Ejecutivo que no considera urgentes las políticas públicas hacia la erradicación de las violencias sexistas”, afirma.
“Se siguen desmantelando y vaciando los organismos que deberían llevar adelante planes y programas para dar cumplimiento a leyes nacionales que fueron avances importantísimos y marcaron agenda en otros países de América Latina. La violencia es un tema de derechos humanos y no de inseguridad. Nos siguen matando”, señala.
Hijos, fuerzas de seguridad y responsabilidades
Por su parte desde Observatorio de las Violencias de Género de “Ahora que sí nos ven” registró 140 femicidios y 169 intentos. “Por la inoperancia y negligencia de la justicia, al menos 125 niños y niñas perdieron a sus madres -durante julio, fueron un total de 17-; mientras que seis (6) de los femicidas pertenecen o formaron parte, en algún momento, de alguna fuerza de seguridad (3 policías y 3 militares). A su vez, hubo tres transfemicidios. Es importante volver a remarcar que este total se basa en lo que relevamos de los medios de comunicación, porque sabemos que en la realidad el total es mucho mayor”, señalaron.
Según esta organización el 30 % de las víctimas fueron asesinadas con arma blanca, el 22,1 % con arma de fuego, 18,6 % murió por asfixia, el 10,7% producto de golpes, 5,7 % quemadas y hay un 12,9 % por otras causas.
Y agregaron: “En este marco, donde la violencia de género se mantiene vigente y se recrudece, el gobierno de Javier Milei desestima su existencia y recorta y vacía diferentes organismos y programas claves para tratar la problemática. A principios de junio pasado, por ejemplo, despidieron al 80% de trabajadoras y trabajadores de la actual Subsecretaría de Protección contra la Violencia de Género. Posteriormente, se desmanteló y la ministra Claudia Barcia, renunció a su cargo”.
