Los presidentes de los clubes Regatas, Belgrano y La Emilia tienen posicionamientos similares acerca de la irrupción de las Sociedades Anónimas Deportivas que impulsa el Gobierno nacional. Para Pablo Capriotti (Club de Regatas), “las SAD no encajan en los modelos de club como el nuestro”. Por su parte, Ezequiel Parodi (Belgrano) deja una puerta abierta: “es algo que se va a venir. Tenemos que estar atentos a qué es lo que va pasando”. En tanto Franco Menichelli (La Emilia) opina que “los clubes de barrio hacen una tarea particular que nada tiene que ver con una empresa”.
De la redacción de EL NORTE
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El gobierno de Javier Milei confirmó el avance en la conversión de los clubes de fútbol en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) y permitir la incorporación de capitales privados. Mediante una resolución publicada en el Boletín Oficial, la Inspección General de Justicia (IGJ) habilitó a las asociaciones civiles sin fines de lucro a cambiar de régimen a partir del 1 de noviembre próximo.
Esa transformación no será obligatoria ni automática, sino que deberá ser sometida a la votación de los socios de cada una de las instituciones si se recibieran propuestas de esa índole. Si se opusieran, los clubes conservarán su actual funcionamiento y seguirán siendo propiedad de los socios como lo vienen siendo hasta ahora.
EL NORTE y Radio U consultó a presidentes de distintos clubes de la ciudad sobre su mirada.
Pablo Capriotti, presidente del club de Regatas, fue terminante: “Esas sociedades anónimas deportivas no encajan en los modelos de club como el nuestro”. Capriotti sostiene que “nuestro club jamás lo sería. No tiene objetivo para ser una sociedad anónima porque, más allá de que tengamos un deporte semiprofesional o profesional como el básquet, de ninguna manera estamos dispuestos a transformarnos en una SAD”. Ampliando sus argumentos mencionó que “ni los estatutos del club lo permiten, ni es voluntad de ningún dirigente, ni de ningún socio cambiar las formas actuales en nuestro club”.
En tanto Ezequiel Parodi, presidente de la comisión directiva del Club Belgrano, mencionó que “todavía estamos lejos. Sin embargo, es algo que se va a venir y es algo que tenemos que empezar a mirar, a estar atentos a qué es lo que va pasando”.
El decreto de reglamentación de las SAD que prepara el ministro Federico Sturzenegger pondrá definitivamente al gobierno en la vereda de enfrente de la Asociación del Fútbol Argentino y de su presidente Claudio “Chiqui” Tapia. Parodi destacó: “Esto va a venir de arriba para abajo, la realidad es que el formato va a venir desde el fútbol y de ahí va a decantar para el resto de los clubes del país”.
A diferencia de las asociaciones civiles sin fines de lucro, las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) operan con fines de lucro, es decir buscan beneficios individuales y ganancias. El principal cambio que dispuso el decreto en relación al deporte está relacionado con el artículo 19 bis de la Ley del Deporte (20.655). La nueva normativa permite que las entidades deportivas asuman la figura legal de SAD.
En la actualidad, las organizaciones rectoras del deporte en nuestro país -como es el caso de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA)- prohíben la afiliación y participación en los torneos de un club que sea una SAD. Dicho de otro modo, para que un club pueda ser admitido dentro de la AFA debe organizarse jurídicamente como asociación civil.
“De mi parte, – dijo el dirigente belgranense – son discusiones lindas”. “Hoy es difícil tener una postura por SAD sí o SAD no, porque todavía no se ha analizado lo que tiene a favor y en contra, se desconocen un montón de cosas”, destacó. En esa línea contó que “nosotros, en la estructura de nuestro club tenemos una escuela, un barrio y tranquilamente podrían estar administrado por una empresa privada” y agregó que “también ahí hay que ver cómo se controla, el accionar, hay muchas cuestiones reglamentarias que nosotros tenemos que empezar a mirar a ver cómo es”.
“Nosotros estamos abiertos a los que sirva”, sostuvo el representante del Club Belgrano y adelantó que la institución “tiene un proyecto muy ambicioso por delante que es la construcción de un gimnasio en la zona de autopista y a nosotros todo lo que el privado nos pueda colaborar y traccionar nos sirve”.
Al respecto mencionó: “No veo con malos ojos la posibilidad de asociarnos o de derivar acciones que tal vez al privado les sirven y las pueda desarrollar. Nuestra limitación siempre es el recurso humano, más que el económico. Por ahí el privado puede dedicar otro tipo de estructura y generar un funcionamiento mucho mejor de lo que nosotros podemos brindar”. “Es un análisis que tenemos que hacer seriamente”, planteó Parodi.
La Emilia y Defensores
Gianfranco Menichelli, presidente del Club Social y Deportiva La Emilia, expresó que “los clubes son de los socios, por lo tanto, las decisiones las toman los socios”. Además, especificó que “los clubes de barrio hacen una tarea, un trabajo particular en lo deportivo, lo social y de contención que no tiene nada que ver con una empresa”.
Al respecto, detalló que “el tema de las SAD viene más que nada por el negocio del fútbol, pero también deja abierta la posibilidad de que cualquier institución pueda ser privada” y agregó: “Me parece que eso no debería pasar”.
No obstante, sostuvo que no ve descabellada “la participación de terceros en ciertas obras, con alguna limitación”. Recordando la historia del Club La Emilia, mencionó que inicialmente “fue una sociedad anónima, pertenecía a la fábrica”, mencionó que “todo lo que nosotros tenemos plantado vino de una sociedad anónima, después para adelante podemos ver el desenlace. Quiebra la sociedad anónima y el club quedó acéfalo y se tuvo que comprar con el aporte de los socios y de mucha gente que intervino”; de lo contrario “hoy no estaríamos hablando de que existiera el club La Emilia”, remarcó.
Por otro lado, el dirigente resaltó que “hay que ver las limitaciones que tiene el alcance de las SAD” y reconoció que “obviamente que con un mayor poder adquisitivo uno puede avanzar en obras que con el aporte solo de socios es más complejo”; sin embargo, reiteró que “ahí entra a jugar que el club tiene una tarea social y tiene una tarea de contención”. En cambio, dijo, que “las empresas buscan un fin de lucro, esto es así. Cuando en una empresa no te va bien, no vas a invertir”, sentenció.
Finalmente, el presidente del Club Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, Sebastián Briatta, declaró que “Defensores es y seguirá siendo una asociación sin fines de lucro” y remarcó: “Defensores es de sus socios y socias que son la esencia de estos 78 años de vida y tal como lo marca su historia, la institución ha sido respetuosa de la masa societaria, que siempre marcó el camino de ser una asociación sin fines de lucro”.