El capitán de la Selección Argentina quiso tirar un centro pero pisó mal, cayó y no logró reincorporarse sin atención médica. Ya en el segundo tiempo, un dolor en el isquiotibial derecho lo sacó de la final definitivamente.
El capitán de la Selección argentina, Lionel Messi, debió ser reemplazado en la final de la Copa América ante Colombia por una lesión muscular.
El astro argentino estaba persiguiendo a un jugador colombiano cuando tuvo que tirarse al piso por una molestia en la parte posterior de la pierna derecha a los 20 minutos del segundo tiempo.
En su lugar entró el extremo Nicolás González.
Luego de esta situación se vio a “La Pulga”, de 37 años, llorando desconsoladamente en el banco de suplentes.
Lamentablemente, y pese a su esfuerzo físico, se vio obligado a salir en medio de la segunda etapa y rompió en llanto en el banco de los suplentes.