El Gobierno bonaerense anunció cambios en el nivel. Desde 2025 se implementará un sistema de acreditación por materias, entre otros puntos. “La propuesta debería evaluarse en su totalidad para saber si es lógica y coherente, si tiene todo el atrevimiento que se espera y si logra mitigar los males que se padecen. Por supuesto que estamos lejos de la gran transformación que se necesita”, analizó consultado por EL NORTE el Prof. Dr. Jorge Noro.
De la Redacción de EL NORTE
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La provincia de Buenos Aires implementará cambios en la escuela secundaria a partir de 2025, según lo anunció el director general de Cultura y Educación, Alberto Sileoni. Uno de los puntos más destacados es que ya no se repetirá un año completo, sino que solo se recursarán las materias desaprobadas. Los cambios incluyen un nuevo régimen académico y, durante el año próximo, la elaboración de nuevos diseños curriculares. EL NORTE consultó al Prof. Dr. Jorge Noro, quien analizó el contexto de la reforma. “La propuesta debería evaluarse en su totalidad para saber si es lógica y coherente, si tiene todo el atrevimiento que se espera y si logra mitigar los males que se padecen. Por supuesto que estamos lejos de la gran transformación que se necesita”, consideró el referente local.
Las modificaciones enmarcadas en la iniciativa denominada “Es más secundaria” se basaron en “las propuestas planteadas por docentes, estudiantes, directoras y directores de escuelas”. Sileoni precisó que una encuesta con 12.000 docentes del nivel medio durante el año pasado arrojó que “el 92% creía que había que hacer un cambio”. “¿Por qué nos ponemos tan nerviosos con un sistema que tiene 100 años y que no ha demostrado que los pibes aprenden más cuando repiten? El mundo salió de la repitencia hace tiempo, buena parte de la Argentina. Más de la mitad del país ya tiene otro régimen académico”, interpeló en declaraciones radiales.
“Hay un consenso generalizado en la necesidad de eliminar o sustituir la repitencia porque los males que provoca –en nuestro tiempo– son superiores a los beneficios que produce. Pero el problema aparece cuando hay que definir cuál es el camino o dispositivo para resolver el retraso o la ausencia en los aprendizajes de las diversos saberes y disciplinas que los alumnos deben cursar y acreditar cada año”.
Prof. Dr. Jorge Noro
Puntos de la reforma
Entre los puntos de la reforma escolar impulsada desde el Gobierno de Axel Kicillof se encuentran:
– No se obligará al alumno a recursar todas las materias del año. Simplemente deberá volver a cursar las que haya reprobado.
– Las materias no aprobadas -hasta cuatro- se rendirán a través de un curso acelerado entre diciembre y marzo donde se evaluará cómo es la situación del alumno y si logra revertir lo desaprobado. En caso de tener más de cuatro sin aprobar en un año, esas que excedan el número deberán ser recursadas en el siguiente período lectivo.
– Ya no se repetirá un año entero, sino que se hará una intensificación de la enseñanza al principio y final de los dos cuatrimestres en cada materia desaprobada, siempre y cuando sean hasta cuatro.
– En caso de que las materias pendientes de aprobación sean cinco o más, recién ahí las que excedan el límite se deberán recursar.
– La evaluación será por nota numérica en dos cuatrimestres, en los cuales se deberá aprobar con 7 o más en cada uno de los segmentos.
– Se incorporarán diferentes propuestas formativas, entre las que habrá más posibilidades de realizar pasantías en organizaciones comunitarias y ámbitos de estudio superior.
Interrogantes
“En todos los sistemas educativos del mundo -excepto unos diez países que tienen formatos propios- rige el sistema de repitencia como aquí: es el único modelo que se ha encontrado desde la creación de la escuela para asegurar que todos alcancen el nivel de conocimiento que el sistema propone y exige para cada grado y año. Principalmente cuando se puso en discusión el formato actual de la escuela moderna, en el último cuarto del siglo XX, el tema de la repitencia fue puesto en discusión en todos los sistemas y en agenda de las discusiones académicas sobre las condiciones de la educación escolarizada. Hay un consenso generalizado en la necesidad de eliminar o sustituir la repitencia porque los males que provoca -en nuestro tiempo- son superiores a los beneficios que produce. Pero el problema aparece cuando hay que definir cuál es el camino o dispositivo para resolver el retraso o la ausencia en los aprendizajes de las diversos saberes y disciplinas que los alumnos deben cursar y acreditar cada año”, indicó Noro y preguntó: “Pero la culpa ¿la tiene solamente el estudiante, sus padres o su familia? El dispositivo de la repitencia supone que no hay nada que revisar en la propuesta curricular, en la organización escolar y en la enseñanza, puesto que el fracaso escolar se explica únicamente por la desidia, el desinterés, la falta de estudio, las inasistencias, la inmadurez, las carencias afectivas o de acompañamiento de los adultos convivientes, y otros factores que corresponden a los estudiantes y su entorno familiar. ¿Y el sistema no tiene ninguna responsabilidad? ¿Acaso la no repitencia o el avance continuo asegura que un número creciente de adolescentes puedan permanecer y concluir el tiempo y forma, y con la calidad deseada el secundario?”.
Debate importante
“La provincia de Buenos Aires propone una serie de cambios (cursada cuatrimestral, asistencia intensiva a los que tienen problemas, nuevos diseños curriculares), y entre ellos está la no repitencia: la propuesta debería evaluarse en su totalidad para saber si es lógica y coherente, si tiene todo el atrevimiento que se espera y si lograra mitigar los males que se padecen o si son reformas superficiales que solamente cambian nombres y prácticas, para dejar las cosas como están. Por supuesto que estamos lejos de la gran transformación que se necesita, en donde desaparecerían cuestiones como la repitencia. Son buenos tiempos para pensar y debatir estas cuestiones importantes (la educación) y dejar de lado tantas discusiones innecesarias”, concluyó el especialista de nuestra ciudad.
Críticas
Tras el anuncio que realizó el Gobierno bonaerense, las críticas por parte de la oposición se hicieron presentes desde diversos sectores.
El exministro de Educación de la Nación durante el gobierno de Mauricio Macri y actual presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, Alejandro Finocchiaro, fue uno de los primeros en reaccionar y sostuvo que la nueva medida se trata de “un ataque de [el gremio docente] CTERA”. “Esta clase de políticas educativas nos llevaron a que 50% de los chicos terminen la educación obligatoria sin conocimientos básicos”, sostuvo.
Entre varias críticas vertidas hacia la medida, Florencia Retamoso -diputada bonaerense de PRO- publicó en X: “Las verdaderas políticas constructivas deberían enfocarse en cómo mejorar la formación docente, la modernización de contenidos y las propuestas pedagógicas en lugar de maquillar los fracasos de un sistema educativo ideologizado y de la propia incapacidad para generar propuestas superadoras”.
El legislador provincial de La Libertad Avanza (LLA) Agustín Romo sostuvo que “le enseñan a los chicos que esforzarse no tiene ningún beneficio y que no hacer nada no tiene ninguna consecuencia”.