La directora de la institución educativa explicó que lo principal es poder recibir una asistencia a través de FANI para la construcción del comedor al cual hoy asisten 200 alumnos. Además, anticipó en qué serán utilizados los fondos del FAE.
La semana pasada, Rotary Club hizo entrega de los primeros pares de medias recolectados en la campaña “Pies Calentitos”. Una de las dos instituciones educativas que recibió la donación fue la Escuela N° 1253 “25 de Mayo”. Su directora, Mabel Cáceres agradeció profundamente este gesto de Rotary y se refirió a las diversas necesidades que afronta en la actualidad la comunidad educativa que dirige.
“Estamos realmente agradecidos con este grupo de integrantes de Rotary por esta donación de medias, gorros, bufandas y escarpines tejidos para los niños de nuestra escuela. Nos puso realmente muy felices”, comenzó.
En relación al presente de la institución educativa comentó que con los fondos recibidos por parte del FAE se repararán los juegos del Nivel Inicial, y también será necesario comenzar con la poda de algunos árboles que corren riesgo de caer sobre el tapial. “A la par estamos haciendo una reparación de cañerías rotas en el ingreso al SUM”, agregó. A su vez, esperan poder concretar otro trabajo que está postergado y requiere la intervención del Ministerio de Educación que es la construcción desde cero del comedor escolar, “que aunque nos garantizaron que no hay riesgo de derrumbe está todo fisurado. Al estar tan deteriorado requerimos de un FANI que nos provea la provincia”, explicó dejando en claro que por el estado que presenta no funcionarían los arreglos por lo cual la intención es poder rehacerlo desde un inicio.
En relación al comedor, Cáceres confirmó que este año se incrementó el número de asistencia. “Evidentemente hay mayores necesidades, la situación está complicada y hoy comen a diario alrededor de 200 niños”, prosiguió y dejó en claro que era una situación que como institución preveían. “Son aproximadamente 40 niños más que el año pasado, teniendo en cuenta la realidad de las familias de nuestros alumnos sabíamos que era una posibilidad y estamos tratando de cubrir todas esas necesidades”, dijo. Vale destacar que la escuela tiene pendiente un cargo de un ayudante de comedor, “el movimiento es intenso y necesitamos un par de manos más”.
Por último valoró la conformación de la nueva cooperadora de la cual participan padres y madres de los alumnos. “Con la colaboración de ellos estamos haciendo pequeños trabajos como pintura”, finalizó.