Los principales líderes de la oposición política criticaron con dureza el discurso que pronunció el presidente Alberto Fernández en la Plaza de Mayo, al festejar a tres días de la derrota electoral en las elecciones de medio término el Día del Militante.
“Escuché decir, ‘¿Si perdieron qué celebran?’ Y yo les digo: el triunfo no es vencer sino nunca darse por vencido”, fue la frase que más reacciones generó en el arco opositor, debido a que consideraron que se trata de un desconocimiento de la victoria que tuvo la oposición el domingo en 15 provincias, incluido el territorio bonaerense, la pérdida de la mayoría en el Senado y la reducción en cantidad de diputados.
“Es un discurso violento y desligado de la realidad y de lo que sucedió el domingo, inventando una conspiración en contra del Gobierno, poniendo en boca de Juntos por el Cambio actitudes que Juntos por el Cambio no tuvo nunca, de ninguna manera, porque nosotros fuimos siempre una oposición institucional y republicana y decide quiénes son los actores de un diálogo que no es tal, porque es un proyecto unilaterales que se mandan al Congreso”, aseguró la presidenta del PRO, Patricia Bullrich.
Uno de los aludidos desde el escenario por el primer mandatario, el diputado electo por La Libertad Avanza, Javier Milei, aprovechó para lanzar fuertes cuestionamientos tanto al gobierno nacional como a los sectores opositores: “No participo de diálogos entre miembros de la casta que solo sirven para cagar a la gente”, afirmó. Luego, retuiteó el mensaje: “Alberto Fernández acaba de presidencializar a Javier Milei. Nombró a sólo dos políticos de la oposición, lo puso de igual y lo subió al ring”.
El diputado nacional electo Diego Santilli también cuestionó la movilización oficialista: “Presidente, la campaña ya terminó. Basta de discursos y marchas para la tribuna. El pedido de los argentinos fue claro. Hay que discutir ya cómo generar trabajo y cómo hacemos para que los argentinos vivamos más seguros”.
“El presidente Alberto Fernández acaba de desperdiciar una oportunidad única. La negación y la agresión es todo lo contrario al diálogo”, afirmó el presidente de la Unión Cívica Radical, Alfredo Cornejo, en un mensaje publicado en Twitter.
“Me parece que el Presidente no se fortaleció sino que se debilitó con un acto que sólo escenificó las diferencias que hay en el Frente de Todos. Por eso habló de la necesidad de llegar a una “síntesis”. Mientras ellos se ordenan, los problemas de los argentinos empeoran. Apúrense”, agregó el diputado Mario Negri, presidente del interbloque de Juntos por el Cambio.
Maximiliano Ferraro, que preside la Coalición Cívica, el partido de Elisa Carrrió, advirtió que “el Presidente actúa como comentarista de la realidad. En vez de solucionar los problemas inventa triunfos y festeja ilusiones. De un gobierno incapaz, que rompió contacto con los hechos y no escucha la contundencia de las urnas no se puede esperar más que privilegios, ahogo a sectores pobres y medios, inflación, inseguridad y asfixia en general”.
Que deje de echarle la culpa al otro, es hora que se ponga a gobernar y de respuesta a los problemas más acuciantes de los argentinos”, afirmó, al tiempo que Hernán Reyes, diputado porteño por la CC, agregó que lo que ocurrió en la Plaza de Mayo fue “un festejo a contramano de la Argentina. Piensan en ellos, se miran el ombligo. No hay una sola repuesta al pedido de los argentinos, no les importamos nada y se jactan de ello”.
“El Presidente vive en otra realidad. No reconoce los resultados, organiza una marcha para festejar la derrota e inventa un relato de “ganar perdiendo”. Y sigue echándole la culpa de su desastrosa gestión a otros. ¿Por qué no organiza una Junta Médica para su realidad paralela?”, agregó el diputado electo Gerardo MIlman.
Por su parte, el diputado Fernando Iglesias publicó en sus redes sociales: “El regreso de Perón a la Argentina, en 1972, inauguró la peor década de la historia nacional. Lo festejan. Y festejan también la paliza electoral que recibieron el domingo. Masoquismo. Necrofilia. Pulsión tanática. El peronismo se explica con un manual de psiquiatría”.
“El presidente sigue desaprovechando oportunidades de reivindicarse con los argentinos, admitir la derrota y comenzar a escuchar a quienes se vienen manifestando desde las PASO con un mensaje claro: cambien el rumbo, por acá no es. Ya sabemos que nunca les interesó dialogar”, dijo el secretario general del PRO, Eduardo Macchiavelli.