20 C
San Nicolás de los Arroyos
viernes, octubre 18, 2024
Edición Diaria
Edición N°

Derechos humanos, feminismos y democracia

DÍA DE LA MEMORIA POR LA VERDAD Y LA JUSTICIA

“A 48 años del 24 de marzo de 1976 seguimos en contra del terrorismo de Estado. Y lo que se vive hoy no es libertad. Va en contra de la representación de las mujeres, de las organizaciones sociales y políticas, feministas, de las sexualidades disidentes, leyes como la del aborto, del ente regulatorio contra la discriminación. Hay atentados contra mujeres, periodistas, y no pasa nada”, marcó a EL NORTE Miriam Primo, integrante de la Mesa de la Memoria por la Justicia de San Nicolás y de la Colectiva Sororidad de Villa Constitución y Empalme.

feminismos

De la redacción de EL NORTE
[email protected]

Cada 24 de marzo se recuerda el inicio de uno de los episodios más oscuros de la historia de nuestro país. En los calendarios figura como el ´Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia´, consignas que surgieron y se mantienen vivas a partir de movimientos conformados, en gran parte, por mujeres activistas. En 1976, la Junta Militar tomó el poder mediante un golpe de Estado y, a través del aparato estatal, impulsó un plan sistemático de persecución, represión y crímenes de lesa humanidad.

Pensar esta efeméride desde una perspectiva feminista implica poder hacer un ejercicio de memoria que recuerde la especificidad que tuvieron los mecanismos de la violencia de la dictadura sobre los cuerpos de las mujeres e identidades feminizadas que, con su formación, militancia y pertenencia a organizaciones, cuestionaban el lugar para ellas otorgado en la sociedad patriarcal. La violencia que las atravesó en los centros clandestinos de detención, tortura y exterminio fue específica: abusos sexuales, violaciones, agresiones verbales, amenazas, desnudez forzada, embarazos no deseados, abortos producto de la tortura, partos clandestinos, separación y apropiación de sus hijos e hijas y esclavitud sexual fueron algunas de las formas particulares que adquirieron estas violencias. En este marco y considerando el contexto actual, EL NORTE dialogó con Miriam Primo, integrante de la Mesa de la Memoria por la Justicia de San Nicolás y de la Colectiva Sororidad de Villa Constitución y Empalme.

ATENTADOS CONTRA LAS MUJERES

“El ataque a la compañera de la Red Nacional de HIJOS -que la organización denunció esta semana- tiene un claro correlato con las acciones y los discursos de odio que tiene el Gobierno nacional, que diariamente incita a la violencia a las y los militantes por los derechos humanos. Repudiamos este hecho, que se vincula también a una práctica de la dictadura militar. Las mujeres estamos expuestas constantemente a la violencia sexual. A 48 años del 24 de marzo de 1976 seguimos en contra del terrorismo de Estado. Y lo que se vive hoy no es libertad. Va en contra de la representación de las mujeres, de las organizaciones sociales y políticas, feministas, de las sexualidades disidentes, de ambientalistas, jubilados, de leyes como la del aborto, del ente regulatorio contra la discriminación. Hace poco se murió una chica por no recibir los medicamentos contra el cáncer. Hay atentados contra mujeres, periodistas, y no pasa nada”, marcó.

La militante feminista nicoleña de DD.HH. evocó y sostuvo: “Si hablamos de lo que fue la desaparición forzada de mujeres y secuestros de bebés, es muy lamentable. Estuve en la ESMA, mostraron el sector donde hacían parir a las mujeres en una mesa de un metro por uno con cincuenta. Las hacían limpiar ese espacio, la placenta, todo muy terrible. Queremos que no se silencien las voces. Todos tenemos derecho a decir lo que pensamos sin ir en contra de los demás, y esto se ataca aún más en el caso de las mujeres. Y son 30.000 desaparecidos. Y en las disidencias sexuales, decimos que son 30.400 porque hay 400 casos -como mínimo- de secuestros y desapariciones de personas por ser disidentes sexuales”.

MADRES Y ABUELAS

Las Madres, las Abuelas y las mujeres que, en su condición de madres, forman parte de otros organismos de derechos humanos como Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas se fueron convirtiendo en un nuevo sujeto político, capaz de crear espacios de resistencia donde dominaba el terror y de convertir las relaciones familiares y personales en relaciones políticas. En términos de género, el significado de su lucha es muy relevante y trasciende las épocas, porque la resistencia que estas mujeres protagonizaron contra el terrorismo de Estado cuestionó profundamente la idea de que las mujeres eran dóciles, que acataban órdenes y que podían ser fácilmente doblegadas. El reconocimiento público a estas mujeres luchadoras fue llegando con el paso del tiempo y hoy están identificadas, tanto en la Argentina como en el resto del mundo, como un emblema de los derechos humanos.

IGUALDAD DE OPORTUNIDADES

“En esta fecha no podemos olvidarnos de las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo, que fueron las primeras que salieron a pedir por sus hijos y sus hijas, a reclamarle al gobierno de facto en ese momento. Siguen luchando y jamás lo hicieron con odio, nunca buscaron revancha. Siguen batallando con amor. Son un referente a nivel nacional e internacional”, destacó.

Primo precisó: “Cuando hablamos de feminismos, no es que luchamos por ser más que los varones, sino de tener igualdad de oportunidades. Hay techo de cristal en el ámbito laboral, los productos de higiene femenina cuestan más que los masculinos. A las mujeres se nos sigue negando en la plena participación política, la igualdad económica, y otras tantas problemáticas”.

“Nunca más. Memoria, verdad y justicia”, concluyó.

- Publicidad - spot_img