En el lugar, los arqueólogos encontraron armas, vigas de madera calcinadas y decenas de piezas antiguas en este lugar ubicado a unos 60 kilómetros al sur de Jerusalén.
Arqueólogos israelíes encontraron restos de una estructura fortificada griega de 2.100 años de antigüedad, que fue “destruida” durante la revuelta de los macabeos, la rebelión en Judea contra la dinastía seléucida.
La excavación permitió encontrar una estructura de 15 metros cuadrados, con muros de piedra de menos de 3 metros de altura, y una construcción de unos cinco metros de alto dividida en siete piezas, indicó la Autoridad israelí de las Antigüedades.
En el lugar, los arqueólogos encontraron armas, vigas de madera calcinadas y decenas de piezas antiguas en este lugar ubicado a unos 60 kilómetros al sur de Jerusalén.
“Parece que hemos descubierto un edificio que formaba parte de una serie de fortificaciones creadas por el ejército griego, para proteger a la gran ciudad griega de Maresha de una ofensiva de los Hasmoneos”, dinastía de Judea, según indicaron los directores de las excavaciones en un comunicado conjunto.
La revuelta de los macabeos condujo a la toma de Jerusalén, al restablecimiento del culto judío en el Templo de Jerusalén y de la dinastía de los Hasmoneos, que gobernó hasta el año 40 de nuestra era.
El retorno del ritual judío en el interior del Templo, el lugar más sagrado del judaísmo, es precisamente conmemorado por la fiesta judía de Hanuka.