El chofer de un taxi denunció que en horas de la noche le apedrearon el automóvil por avenida Subiza a la altura de Villa Piolín, con claras intenciones de que frene para ser asaltado. Esta modalidad delictiva se repite cada tanto en distintas partes de la ciudad y desde la justicia recomiendan no detenerse y llamar inmediatamente al 911.
De la redacción de El Norte
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El hecho se repite casi por temporadas y las intenciones son más que claras, que la desprevenida victima se detenga para ser asaltada. Estamos hablando de una modalidad delictiva que se repetía generalmente en zona sur y que consiste en arrojar piedras a los automóviles que pasan por arterias oscuras y generalmente en momentos de poca circulación, para que cuando los conductores se detienen a constatar los daños recibidos, son interceptados por delincuentes que los intimidan y les sustraen sus pertenencias y hasta inclusive el vehículo.
Cuidado
Durante un tiempo era a la altura del puente de 9 de Julio donde se daban este tipo de episodios delictivos, como también les ocurre a los trabajadores que se dirigen a realizar sus tareas en la zona portuaria, siendo blanco de los malvivientes.
En esta semana fueron varias las denuncias de trabajadores que al pasar por avenida Román Subiza, que es la continuidad de Rivadavia a la atura del Villa Piolín, pasando el puente, reciben piedrazos contra sus vehículos para que estos aminoren la marcha o se detengan.
De hecho días pasados un taxista sufrió la rotura de la luneta por un cascotazo, pero el mismo muy atinadamente continuó la marcha y efectuó la denuncia a los organismos policiales correspondientes. Desde la fuerzas de seguridad recomiendan repetir esa actitud de no frenar y enseguida dar aviso al 911.