El principal referente del Frente Renovador 100×100 Santafesino hizo sus primeras declaraciones públicas después de que el justicialismo perdiera las elecciones en la provincia de Santa Fe.
Por primera vez -luego de la derrota del peronismo santafesino en las urnas en setiembre del año pasado-, el secretario Parlamentario del Bloque Frente Renovador 100×100 Santafesino y dirigente de ese espacio en la provincia, Oscar “Cachi” Martínez dialogó con la prensa sobre el nuevo escenario político que vive Santa Fe y su percepción acerca de los motivos que provocaron que el justicialismo perdiera la gobernación. “Creo que el peronismo de la provincia deber hacer una profunda autocrítica, lo que no significa de ninguna manera abandonar los principios y valores que lo rigen como la defensa un proyecto de progreso y desarrollo a partir del trabajo y el esfuerzo privilegiando la producción y la protección de la industria nacional , la presencia de un Estado eficiente y eficaz que asegure la educación y la salud pública y de calidad, la defensa de los trabajadores, la protección del mercado interno y la capacidad de consumo de los sectores populares”, manifestó Martínez.
“En 2019 -continuó- el justicialismo logró el acompañamiento de los santafesinos sobre la base de compromisos que luego lamentablemente no se cumplieron. La paz y el orden que se prometió en campaña, por ejemplo, requería que el gobierno tuviera una política clara en esta materia. Esto significaba que entendiéramos el sufrimiento de la gente por la ola de violencia e inseguridad y se encarara este problema con los recursos y la convicción necesaria convocando a todos los poderes y a todos los niveles de gobierno. Esto nunca pudo lograrse. Sin embargo desde la Legislatura trabajamos arduamente en esta temática a lo largo de los cuatro años. Así pudimos conseguir leyes importantísimas como la Ley de Víctimas, el Código Procesal Penal Juvenil, la Ley de Robo de Cables, la de Prisión Preventiva para la portación o uso ilegal de armas, entre otras, logrando amplios consensos para ellas. Pero esto fue solo un ladrillo en el muro que se necesitaba construir contra las mafias y el delito”.
Y siguió enumerando: “Otro de los compromisos que no se cumplieron fue el que se hizo hacia adentro del justicialismo. Debíamos construir la unidad en la diversidad con la convicción de volver para ser mejores. Esto hizo que todo el justicialismo estuviera unido detrás de una candidatura a gobernador. Pero esa unidad en la diversidad que se proclamó en campaña solo quedó en un eslogan vacío de contenido. La unidad en la diversidad exigía que construyéramos en colectivo, para que cada uno pusiera su granito de arena pero nadie se sintiera dueño del arenero. Esto tampoco sucedió, y los santafesinos lo percibieron desde el primer momento.
Ahora no sirve señalar con el dedo a nadie, pero claramente para esa construcción se necesitaba una visión moderna, una coalición no sólo electoral sino de gobierno, donde el elemento catalizador fuera la implementación de políticas públicas para reivindicar nuestros principios y valores y no las mezquindades de un sector”.
“Y por último -añadió- dijimos que queríamos volver para ser mejores. Ello significaba un peronismo renovado, moderno, pero sensible y humilde, con los pies en la tierra, para dar respuestas a una ciudadanía que confió en nosotros. Estoy convencido de que hoy debemos capitalizar los errores cometidos para corregirlos y contribuir con los destinos de nuestra provincia invencible. Y para esto lo primero que debemos hacer es convertirnos en una verdadera oposición, una oposición constructiva, que represente a los miles de santafesinos que volvieron a confiar en nosotros con su voto en septiembre pasado”.