Una desconocida se obsesionó con ella y la hizo vivir una película de terror. Descargaba fotos de ella y le cortaba la cabeza. Así lo describió Silvina Balonchard, victima de este caso.
Silvina tenia 44 años, recién llegada a la Capital de Córdoba.
Al tiempo, una vez sus hijos asentados en la universidad, conoce a su vecino. Quien al tiempo terminó siendo su pareja.
Una tarde, subió una foto a su facebook de perfil. Lo que ella no sabía aun, era que iba a desencadenar una “pelicula de terror”.
Ese día, había ido al campo con sus hijos y su vecino. Y la foto había sido en el mismo lugar con un caballo.
Silvina, es comunicadora y trabajó durante años en distintos programas de radio.
Al momento de subir la foto, empezó a recibir una catarata de notificaciones. Una por minuto.
“¿Ese es el campo de (mencionaba con nombre y apellido al hombre)?, porque nos lleva a todas al principio para seducirte. Hasta hace 5 semanas fuimos pareja y vivimos 2 años juntos. Detesta la psicología y filosofía. Le gusta bastante tratarte mal después de un tiempo”. Ese fue uno de los mensajes que recibió por parte de esta persona desconocida.
No se detuvo en los mensajes, sino que esta persona empezó a comentar en sus fotos incansablemente.
Al principio no le daba importancia y no quería consultarle a su pareja quién era. Hasta que notó que la persona no frenaba con su obsesión. Y ella empezó a tener ataques de pánico por la confusión que le generaba toda la situación.
Su pareja le confesó que era una ex, y que la relación había finalizado. Pero ella seguía obsesionada con el, y al revisarle las redes la encontró a Silvina.
Ese mismo día, se dio cuenta que la ex había descargado una de sus fotos, le había cortado la cabeza y subido a sus redes personales. Y así continuó la obsesión, creciendo cada vez mas. Hasta escribirle “si no querés que pase esto, no subas mas nada”.
Silvina no quería bloquearla. Sentía que de esa forma, naturalizaba la violencia con la que ella se manejaba.
Ley por el hostigamiento digital
Así, a través de la historia de Silvina se inició una campaña. La campaña por el hostigamiento digital. Para visibilizar esta problemática. Y que sea considerado como un delito penal.
Mas allá de Silvina, su caso se ve reflejado en muchas otras personas. Bajo el termino de “stalker”, a veces se juega el limite de la obsesión.