El gobernador de Santa Fe confirmó el traslado de narcos y sicarios, que ya estaban detenidos, a sectores especiales donde pueden ser monitoreados y aseguró que va a suspender la entrada de alimentos a las prisiones
A tan solo horas de asumir como gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro ha anunciado una serie de cambios significativos, especialmente en materia de seguridad, que considera prioritaria para su gestión. Entre las medidas tomadas, se destacan modificaciones en la cúpula policial y en la Policía de Investigaciones (PDI). Sin embargo, uno de los anuncios que generará un impacto inmediato se refiere a las condiciones de encierro.
En una entrevista con Radio 2, el recién asumido gobernador confirmó una “importante operación de restitución de los presos de alto perfil” realizada a las 8 de la mañana de ese día. Detalló que los líderes narcos serán trasladados a un pabellón de alto perfil, donde serán monitoreados las 24 horas para prevenir posibles delitos.
Además, Pullaro señaló que se reinstalarán inhibidores de comunicación, reduciendo aún más la libertad telefónica de los internos. También anunció la suspensión del ingreso de alimentos a las unidades penitenciarias, mencionando incidentes anteriores en los cuales se escaparon presos ocultos en cajas de bananas.
En este contexto, cuestionó la lógica de permitir el ingreso de alimentos externos sin un control adecuado, destacando la necesidad de garantizar el control nutricional de los presos. Aunque dejó abierta la posibilidad de excepciones, como la requisición de una torta por motivo de cumpleaños, reiteró su compromiso de revisar esta política.