La ceremonia se llevó a cabo este sábado 18 de noviembre a las 12 hs. Ante el templo colmado de fieles y con la presencia de 15 sacerdotes, el Obispo, Mons. Hugo Norberto Santiago puso en posesión al nuevo Rector, Pbro. Gustavo Alfredo Salse.
El Rector saliente
Iniciada la Santa Misa hizo uso de la palabra el P. Luis Fernando Prieto, nativo de la ciudad de San Pedro, quien tuvo la responsabilidad de conducir pastoralmente el Santuario durante la última década, como segundo Rector. Lo hizo en términos de agradecimiento hacia todos los que colaboraron de diverso modo para consolar a los que siempre llegan a un Santuario buscando la paz de Dios y el ser escuchados. Fue particularmente difícil en tiempo de pandemia, sobre todo en el año 2020, cuando desaparecieron las habituales multitudes provenientes de distintos puntos del país.
El acontecimiento Mariano
Todo comenzó el 25 de septiembre de 1983, cuando una señora expresó recibir manifestaciones sobrenaturales, y fue atendida por el entonces párroco de la Iglesia Catedral, Pbro. Carlos Antonio Pérez. Al poco tiempo comenzaron las interminables peregrinaciones provenientes de distintas latitudes: había dado comienzo el Acontecimiento Mariano de San Nicolás, que daría origen a una nueva advocación mariana en el seno de la Iglesia argentina: María del Rosario de San Nicolás.
El Santuario
Al decir de Mons. Domingo Salvador Castagna, primer Obispo que intervino en el Acontecimiento, en un momento determinado era necesario “ponerle pecho al pueblo”. Así surgió la edificación que se ha levantado en el “Campito de la Virgen” de la antigua Villa Pulmón. El decreto de creación del mismo se emitió el 15/2/1989, es decir un quinquenio después de los primeros hechos. El primer Rector fue el recordado P. Carlos Alberto Pérez quien estuvo hasta 2014, luego de lo cual tomó posesión el P. Luis Prieto, ahora saliente.
Una Asociación sacerdotal
Luego de constituirse la comunidad religiosa Hermanas Hijas de María del Rosario de San Nicolás, la dimensión que fue tomando el acontecimiento de fe fue tornando necesaria la constitución de una comunidad sacerdotal que se avocara en su carisma, casi exclusivamente a la atención de los peregrinos y a la difusión de la nueva advocación; lo que finalmente se concretó con la erección de la Asociación Clerical Hijos del Sagrado e Inmaculado Corazón de María cuyos estatutos fueron aprobados por el Obispo de San Nicolás, Mons. Mario Luis Bautista Maulión. La presidencia actual de la Asociación, es ejercida por el nuevo Rector, P. Salse.
El nuevo Rector
El P. Gustavo Salse nació en el pueblo de Mariano H. Alfonso, partido de Pergamino, el 7/1/1966. Recibió la ordenación sacerdotal de manos de Mons. Domingo Salvador Castagna el 5/6/1993. Ha sido Director Diocesano de Catequesis durante varios períodos. Fue párroco de San Pablo de San Pedro.
La toma de posesión
La toma de posesión se llevó a cabo en el transcurso de la celebración de la Santa Misa en el mismo Santuario, el sábado 18 de noviembre a las 12 hs. Tras el saludo inicial del Sr. Obispo, hizo uso de la palabra el Rector saliente en términos de agradecimiento; tras lo cual se leyó el decreto de nombramiento del nuevo Rector, quien después realizó la profesión de fe y el juramento de fidelidad al Obispo y a la Iglesia.
La homilía del Obispo
Mons. Hugo Norberto Santiago recordó la fórmula que según palabras del Papa Francisco en el reciente Sínodo, expresan la síntesis de la vida cristiana: adoración y servicio. Lo hizo a través de diversas instancias de su vida personal. Recordó que desde joven hacía adoración al Santísimo, y que, en buena medida de allí había surgido la vocación. Al estar en el Seminario, también tuvo ocasión de rezar junto a otros, y de allí quedaron amistades que duraron décadas. Luego relató que, cuando lo hicieron Obispo, siempre había tenido la gracia de vivir con otros sacerdotes, y pudo compartir la oración y la adoración. Finalmente recordó que al llegar como Obispo de San Nicolás, pudo coordinar con el Vicario General y párroco de la Catedral, P. Javier Fortunato, para encontrarse 3 días a la semana, de 7 a 8 de la mañana para adorar y rezar juntos. Y lo que siempre se puede esperar de la adoración es que surjan como frutos las obras de servicio a los demás.
Luego se refirió al Santuario Diocesano en los siguientes términos: “Hace 7 años que estoy aquí, y creo que el carisma de este Santuario son las confesiones”; ya que muchas veces había tenido ocasión de confesar y ver la obra de Dios en la gente. Expresó que “el modo de confesarse ha variado con el cambio de época ya que ahora, primero cuentan su vida, y luego relatan algunos pecados. Y ello es por la necesidad de sentirse escuchado”. Al referirse al nuevo Rector, manifestó que el P. Gustavo asume como miembro de una comunidad sacerdotal que lleva adelante el Santuario. Valorando su accionar dijo que “Los sacerdotes del Santuario tienen una vida austera y de servicio”, y en razón de ello pidió que recen mucho por la misma, ya que “El servicio del Santuario, es muy exigente”. El Obispo culminó su exposición agradeciendo la década de servicio que había llevado adelante el Rector saliente, manifestando “que habían compartido codo a codo muchas circunstancias, en las que observó una entrega y responsabilidad muy importante”.
Desde una humilde silla
Desde el principio al fin de la ceremonia, cercano al Obispo, estaba sentado quien había sido la figura que Dios puso en el minuto cero del Acontecimiento Mariano de San Nicolás: el P. Carlos Antonio Pérez. Nadie como él tiene la visión de conjunto que las circunstancias le otorgaron. Seguramente en distintos momentos de la Misa habrán circulado sobre su mente las cuatro décadas vividas con sus múltiples facetas, episodios e interrogantes.